* Paisaje agrario oceánico o atlántico o de la España húmeda (clima oceánico, con todos o casi todos los meses húmedos, e inviernos moderados, que proporciona praderas naturales para la ganadería bovina y permite algunos frutales -manzano-, y al que se adaptaron extraordinariamente dos cultivos procedentes de América -maíz y patata-, mientras que las zonas marginales, de suelos más pobres, se dedicban a usos forestales con especies autóctonas -roble y haya- o a la introducción de especies foráneas de rápido crecimiento -eucalipto desde el siglo XIX-, el castaño, mucho más compatible, parece haberse introducido en la Edad Antigua).
* Paisaje agrario del interior peninsular (clima mediterráneo continentalizado, con sequía veraniega e inviernos fríos, a lo que se adapta en secano la trilogía mediterránea de trigo, vid y olivo -el olivo no prospera en la Meseta norte- y la ganadería ovina -en zonas de dehesa, usos mixtos con porcina, y la peculiar ganadería brava-, y en zonas de regadío permite huertas y cultivos industriales -remolacha azucarera, tabaco-; la repoblación forestal del siglo XX se hizo fundamentalmente con coníferas en perjuicio de las especies climácicas -encina, alcornoque-).
La dispersión o concentración del hábitat y de la propiedad (minifundio/latifundio) se disponen ambas en un gradiente norte/sur.
Las estructuras agrarias tradicionales se conformaron con muy distintas características en cada zona de España (por ejemplo: latifundio al sur, minifundio al norte) al superponerse a los condicionantes físicos (por ejemplo: la elevada altitud media y compartimentación montañosa -determinan una gran superficie forestal y menores rendimientos-, el marcado gradiente de pluviosidad-aridez noroeste-sureste) causas antropológicas y jurídicas (por ejemplo: diferentes modos de reparto de herencias), y una lenta evolución histórica que tuvo como hitos los procesos de repoblación medievales y las desamortizaciones del siglo XIX.
La entrada en la Comunidad Económica Europea (1986) supuso la aplicación de la Política Agraria Común (PAC), con modificaciones esenciales en muchos sectores y zonas, fomentados unos por subvenciones, limitados otros por cuotas (la pesca o la ganadería vacuna tradicional), demandándose en algunos casos una vuelta a producciones extensivas, y en otros la especialización en productos con denominación de origen o de agricultura biológica.
* Paisaje agrario oceánico o atlántico o de la España húmeda ( clima oceánico , con todos o casi todos los meses húmedos, e inviernos moderados, que proporciona praderas naturales para la ganadería bovina y permite algunos frutales - manzano -, y al que se adaptaron extraordinariamente dos cultivos procedentes de América - maíz y patata -, mientras que las zonas marginales, de suelos más pobres, se dedicban a usos forestales con especies autóctonas - roble y haya - o a la introducción de especies foráneas de rápido crecimiento - eucalipto desde el siglo XIX-, el castaño , mucho más compatible, parece haberse introducido en la Edad Antigua).
* Paisaje agrario del interior peninsular ( clima mediterráneo continentalizado , con sequía veraniega e inviernos fríos, a lo que se adapta en secano la trilogía mediterránea de trigo , vid y olivo -el olivo no prospera en la Meseta norte- y la ganadería ovina -en zonas de dehesa , usos mixtos con porcina , y la peculiar ganadería brava -, y en zonas de regadío permite huertas y cultivos industriales - remolacha azucarera , tabaco -; la repoblación forestal del siglo XX se hizo fundamentalmente con coníferas en perjuicio de las especies climácicas - encina , alcornoque -).
* Paisaje agrario mediterráneo ( clima mediterráneo costero , con sequía veraniega e inviernos suaves, que con irrigación -incluso en las zonas de clima mediterráneo seco o clima semiárido - permiten el cultivo de cítricos y huertas, incluso zonas de cultivos tropicales y arrozales ).
* Paisaje agrario de montaña ( clima de montaña , con inviernos muy fríos, que permitía apenas explotaciones agropecuarias marginales y usos forestales).
* Paisaje agrario de Canarias ( clima de Canarias , de suaves temperaturas y escasas precipitaciones, muy dependiente de la orografía, que permite el cultivo del plátano, el tomate y productos de primor -además de un peculiar viñedo, al que no llegó la filoxera-, y ganadería caprina en zonas marginales).
La dispersión o concentración del hábitat y de la propiedad (minifundio/latifundio) se disponen ambas en un gradiente norte/sur.
Las transformaciones recientes han modificado los usos tradicionales y las estructuras agrarias en todas estas zonas, alterando los paisajes agrarios en mayor o menor medida. [ 1 ] [ 2 ] [ 3 ] [ 4 ]