Elecciones presidenciales de Argentina de 1963
Fueron organizadas por el gobierno encabezado por José María Guido que había sustituido al presidente Arturo Frondizi derrocado por un golpe de Estado y asumido ilegalmente el poder legislativo y los poderes provinciales, siendo discutible si se trató de un presidente de facto, o simplemente un presidente no constitucional que, impulsado por el propio Frondizi, buscó evitar que tomara el poder una dictadura militar.[1] Las elecciones se realizaron con el expresidente Frondizi detenido e impedido de participar en las mismas y todos los ciudadanos peronistas proscriptos para presentar sus candidaturas, incluyendo también al expresidente Juan Domingo Perón que había tenido que exiliarse.Illia obtuvo solo el 25,14% del total de votos emitidos, lo que condicionaría severamente su presidencia.En este escenario, el nuevo presidente había llegado al poder condicionado desde el inicio por su dependencia electoral del peronismo e institucional de los militares, ambos grupos frontalmente enemistados.Para la siguiente renovación legislativa en 1962, que además traería consigo las elecciones para gobernador de varias provincias, Frondizi aceptó anular parcialmente la proscripción y permitir que varias fuerzas calificadas como neoperonistas presentaran candidaturas.[1] Los militares golpistas terminaron aceptando la situación y convocaron a Guido en la Casa Rosada para comunicarle que sería reconocido como presidente, en tanto y en cuanto se comprometiera por escrito a ejecutar las medidas políticas indicadas por las Fuerzas Armadas.[1] Durante el mandato de Guido, se produjo un enfrentamiento interno en las Fuerzas Armadas, denominado azules y colorados.Los colorados, por su parte, equiparaban al movimiento peronista con el comunismo y abogaban por erradicarlo completamente mediante la instauración de una dictadura militar permanente.A tal fin los votantes debieron elegir electores, quienes a su vez debían elegir al presidente de la Nación, reunidos en congresos electorales separados, reunidos en cada provincia y la Capital Federal.Los votos en blanco fueron 1 884 435 es decir el 19.4 %, máximo de la historia electoral presidencial argentina, y fueron considerados válidos por la justicia.Ambos presentaron compañeros de fórmula diferentes para Aramburu, Arturo J. Etchevehere y Horacio Thedy respectivamente.Con este apoyo la candidatura a presidente de Illia obtuvo 270 votos -31 votos más que el mínimo constitucional necesario- y la candidatura a vicepresidente de Perette obtuvo 269.