La villa segoviana de Cuéllar (Castilla y León) está declarada Conjunto Histórico-Artístico, figura de protección que se extiende por todo su núcleo urbano y abarca tanto la arquitectura artística como la tradicional, que se reparte por sus calles y plazas.
Unido a este inmueble se conserva el recinto amurallado de la Villa, considerado uno de los conjuntos murados más importantes y mejor conservados de Castilla y León,[1] así como un amplio conjunto de arquitectura mudéjar, que representa uno de los focos de este estilo más importantes en toda la cuenca del Duero[2] y es el más numeroso de Castilla y León,[3][nº 1] por lo que es denominada Capital del mundo mudéjar.
En lo que respecta a la arquitectura civil, la casa consistorial de Cuéllar, el molino El Cubo, el Estudio de Gramática, el hospital de la Cruz, el hospital de la Magdalena y el parque arqueológico de San Esteban, entre otros.
Finalmente, en lo que refiere a la arquitectura popular, destacan multitud de casas solariegas blasonadas, con fachadas de cantería y otros materiales, como el palacio de los Rojas, el palacio de Pedro I o el palacio de Santa Cruz, entre otros muchos.
Así el Ayuntamiento de Cuéllar elaboró el plan denominado Área de Rehabilitación Integral (ARI), que clasifica y define los inmuebles y establece las medidas de conservación y protección de todo el conjunto.