La división de la parte que daba a los soldados se hacía con orden.En cuanto al resto de los bienes móviles, lo que cada uno había tomado era suyo; Unusquisque enim quod in praeda rapuerat ipsum erat.c. 31) En el tiempo de la guerra de Troya los soldados llevaban el botín a sus respectivos jefes, que le presentaban al General y este hacia la distribución por partes iguales pero se le daba siempre una más considerable.Aquellos a quienes habían tocado, podían guardarlos, venderlos o darlos por rescate.Estaba prohibido a todo soldado lacedemonio despojar los muertos antes de la victoria.6. p. 345) Alejandro Magno se reservó el botín, para distribuirle como recompensa o para subvenir a los gastos de la guerra.El cónsul Apulio acusó a su colega Servilio de no haber enviado nada del botín hecho en la guerra contra los volscos, al tesoro público y de haberle distribuido entre sus favoritos.Se ve en la historia romana que los Cónsules daban todo o parte al ejército, le hacían vender y enviar enteramente al tesoro público, escoger una porción para sí, para ornamento de su triunfo, para el del forum, para otros edificios públicos o para la construcción de los templos y la celebración de los juegos, de que hacían voto a Marte, a Belona, a Júpiter Estator y a otros Dioses; fuese al partir para una expedición o en una batalla cuyo suceso pareciese dudoso.Postumio y Menenio, habiendo vencido a los Sabinos, hicieron vender el botín y repartir a cada ciudadano otro tanto cuanto había pagado para los gastos de la expedición, (id.El dictador Aulo Postumio reservó la décima parte del botín tomado a los volscos, para los juegos y los sacrificios (consistía en cuarenta talentos), e hizo construir en honor de Baco, Ceres y Proserpina un templo de que había hecho voto a estas divinidades al partir de Roma.Lucio Papirio Cursor, reservó para su triunfo la mayor parte del botín, hecho sobre los Samnites y no dio nada a los soldados.Su colega, Espurio Carvilio, que consiguió también los honores del triunfo, empleó el dinero de los despojos, parte en el tesoro público, parte en la construcción de un templo a la fortuna vigorosa y dio el resto a sus tropas.Lucio Emilio, habiendo tomado el campo de los Etruscos, distribuyó recompensas a los más bravos y dio al resto de las tropas los esclavos, los caballos, las tiendas y todo lo que en ellas se encerraba.475) Lucio Papirio Cursor hizo distribuir a sus tropas todo el botín tomado en Sepinum, ciudad de los samnitas.459) El dictador Cincinato habiéndose hecho dueño de Corbion, mandó llevar a Roma lo más precioso que encontró en el botín y dividió el resto por iguales partes entre las centurias: el Senado le instó que tomase la parte que quisiese de las tierras conquistadas, de los esclavos y de la plata y que substituyera a su pobreza, las riquezas adquiridas por un medio tan justo como honroso.Sus parientes, y amigos solo deseando ver a un hombre tan grande en la opulencia, le ofrecieron considerables presentes; pero agradeciéndoles su buena voluntad, nada quiso recibir, y se retiró a su choza, donde en lugar del poder supremo, volvió a ejercer una vida laboriosa, estimando más la pobreza, que los otros hombres las riquezas.Cuando se agotaba el tesoro, el cónsul lo reponía con el producto de la venta del botín.El general hacía quemar algunas veces los despojos e honor de los dioses.Fabio habiendo vencido a los Samnites y a los Galos en el combate en que P. Decio se sacrificó como su padre lo había ejecutado, mandó quemar los despojos en honor de Júpiter vencedor.Marcelo combatiendo contra Aníbal, sacrificó los despojos de los enemigos a Vulcano y los hizo quemar después de la victoria; y Escipion quemó el campo de Siphás que había sacrificado a Vulcano e hizo llevar a Roma alguna parte escogida del botín.Una porción de los despojos se reservaba para adornar el foro y los templos.En la guerra hecha contra los samnitas por L. Papyrio Cursor, este cónsul consiguió tan gran cantidad que repartió a los aliados y a las colonias vecinas para adornar sus templos y otros edificios públicos, (liv.C. Claudio triunfando de los ligures, envió al tesoro público una gran suma y dio 50 dineros a cada soldado; (4.l.L. Anicio, triunfador de los ilirios, dio al soldado 45 dineros (4. libr.La otra mitad se mantenía sobre las armas, dentro o fuera y los enviados al pillaje traían el botín a su Legión.La parte del botín que daba el General a los soldados, se les debía distribuir por iguales porciones.Mas si el Rey pedía alguna porción particular, se le concedía ya fuese por respeto o por temor.{de C. 531) Los prisioneros de guerra eran una parte del botín y aquellos que los habían cogido o a quienes habían tocado en suerte, podían retenerlos en esclavitud o darlos por rescate.La división del botín se practicaba aún en tiempo de Luis IX.Pero Guesclin tan generoso como bravo, le abandonaba enteramente a los soldados y si se quedaba alguna vez con dos o tres prisioneros de distinción era para emplear su rescate a beneficio de los suyos; a esta conducta del jefe se asimilaba, por decirlo así la de todos los que servían bajo sus órdenes.