En la primera, se citan dos pasajes bíblicos del Evangelio según San Lucas: la Anunciación del Nacimiento de Jesús por el Arcángel Gabriel a María: «Dios te salve, llena eres de gracia, el Señor es contigo» o literalmente: «¡Alégrate!
Agregan a veces la expresión porque es el Salvador de nuestras almas que tú amparas.
En el Renacimiento y el primer barroco fue musicalizado por compositores como Juan de Anchieta, Hugh Aston, Thomas Ashwell, Johannes Brassart, Josquin des Prez, Orlando di Lasso, William Byrd, Antonio Carreira, Eustache du Caurroy, Pierre Certon, Giovanni Pierluigi da Palestrina y Tomás Luis de Victoria.
Pietro Mascagni adaptó el intermedio de Cavalleria rusticana con una letra algo diferente a la corriente en 1890.
El compositor ruso César Cui que fue educado en la religión católica, musicó la oración al menos tres veces: como el Ave Maria, Op.
Existen versiones de Wolfgang Amadeus Mozart, Franz Liszt, Edward Elgar, Camille Saint-Saëns, Jacques Offenbach (redescubierto), Gioacchino Rossini, Johannes Brahms, Ígor Stravinski, Lauridsen, Franz Biebl, Lorenzo Perosi, Alessandro Scarlatti, Claudio Monteverdi, Jean-Philippe Rameau, Heinrich Schütz, Carl Czerny, Gabriel Fauré, César Franck, Joseph Haydn, Leoš Janáček, Guatav Holst, Zoltán Kodály, Félix Mendelssohn, Ruggero Leoncavallo, Heitor Villa-Lobos, Frederic Mompou y Pau Casals.
Hay también numerosas versiones por compositores menos conocidos como las de Marcial del Adalid, Justo Blasco y Compáns, Juan Cantó Francés, Isidoro Hernández, Lázaro Núñez-Robres, Josep Rodoreda, Carmen Santiago de Meras, Felipe Pedrell, Rafael Taboada Mantilla, José María Usandizaga, Jesús Guridi, Ignacio Tabuyo, Chago Melián, Joaquín Turina, David Conte, J. B. Tresch, Marcel Dupré, Javier Busto, Katherine Dienes, Kentaro Sato, Leif Kayser, Antón García Abril, Luis Manuel Molina, Maija Einfelde, Michał Lorenc y otros.
La venerable hermana Lucía de Fátima dijo: “la Santísima Virgen, en estos últimos tiempos en que estamos viviendo, ha dado una nueva eficacia al rezo del Santo Rosario.
[15] Numerosos papas han atribuido gran importancia a esta oración: León XIII promulgó la encíclica Supremi Apostolatus Officio, un documento de gran entidad, la primera de sus muchas declaraciones sobre esta oración, en la que propone el rosario como arma espiritual efectiva contra los males que afligen a la sociedad.