Argentina en la Primera Guerra Mundial

Cuando llegaron las noticias a Argentina, el Ministerio de Relaciones Exteriores descartó una protesta formal.

Hostil a la hegemonía creciente de los Estados Unidos desde el fin del siglo XIX reforzó su posición neutral.

La captura fue contabilizada como presa de guerra y el gobierno argentino no intervino en la operación dado que la venta y registro del velero se había efectuado en octubre de 1914.

El ministro de Relaciones Exteriores argentino, José Luis Murature, primero solicitó explicaciones al gobierno británico y luego comunicó su protesta exigiendo disculpas y pidiendo la devolución del barco y que se impartieran órdenes a la escuadra británica del Atlántico para que no impidiera el servicio regular de los demás buques en la navegación entre los puertos argentinos de la costa, si bien en privado admitió su impotencia, dado que el armamento naval de que disponía el país era muy inferior al de los ingleses.

Esto hizo que el gobierno argentino se quejase nuevamente diciendo: ''La República (...) no puede consentir como legítimo el daño directo, a base de una lucha en la que no participa.

No es posible que sus productos neutrales se califiquen en momento alguno como contrabando de guerra.

Un ejemplo de un argentino luchando en la Primera Guerra Mundial podría ser el caso de Vicente Almandos Almonacid (Nacido en La Rioja, Argentina) apodado como «El Cóndor Riojano» fue un ingeniero, diplomático y aviador.

Cuando inicio la guerra Argentina poseía la economía más grande de América Latina.

[12]​ La guerra hizo que Argentina empezara a tener problemas con el modelo agroexportador que adoptaba, como la exportación de cereales (uno de los grandes motores de la economía argentina), aunque también Argentina se dedicó a exportar alimentos y armas a ambos bandos, cosa que pudo sostener ligeramente su economía.

Las naciones beligerantes utilizaron casi todas sus marinas mercantes para la contienda, y además sus flotas atacaron buques mercantes enemigos, con lo que las exportaciones argentinas se hicieron más complicadas.

Más notablemente aún, cayeron abruptamente las importaciones de bienes industriales, lo cual ―sumado a la inconvertibilidad― generó un rápido aumento del valor de los bienes industriales, generando una oportunidad única para la industria nacional.

[14]​ No obstante las limitaciones de capital, el impulso estatal sobre los ferrocarriles logró llevarlos a 33 595 km.

En suma, la economía en su conjunto tuvo una baja del 10 % en 1914, y creció muy lentamente durante el resto de la Guerra.

La administración argentina accedió, convirtiéndose por primera vez en su historia en acreedor de Europa y no deudor suyo.

Aquellos que lucharon junto a los Aliados están en verde, las Potencias centrales en naranja, y los países neutrales, en donde se encuentra Argentina, en gris.
CBarco argentino Presidente Mitre. Es capturado durante la Primera Guerra Mundial (28 de noviembre de 1915) fue interceptado por el crucero británico “Orama” en el Atlántico Sur a unas 12 millas del faro de Punta Médanos
El Barco argentino Presidente Mitre
El velero argentino Oriana
El velero Oriana
El vapor de carga Toro en 1917.
El vapor de carga Toro en 1917.
El Cóndor Riojano vistiendo el uniforme de la Aéronautique Militaire .