La protesta no prosperó, dando inicio la competencia con el arranque del auto 1 de los mexicanos Luis y Tomás Iglesias.
En 1952, en parte debido a la presión de los competidores estadounidenses, se crearon dos categorías distintas, la Sport, para automóviles deportivos de dos asientos, y la Turismo estándar, para automóviles turismo con al menos cuatro asientos.
Para este año, Ferrari diseñó un coche específico para la Panamericana, con el motor derivado del 340 América con nuevos árboles de levas y válvulas más grandes, logrando una potencia de 280CV, alargó el chasis, reforzó las suspensiones con un par de amortiguadores hidráulicos Houdaille del tipo palanca en el tren trasero, con el eje fijado a su vez a ballestas y dobles brazos en paralelos.
Pero la novedad más vistosa era su espectacular carrocería, realizada por Vignale sobre diseño de Giovanni Michelotti, se denominaba Ferrari 340 México, del cual se fabrican 3 cupes para Ascari/Farina, Villoresi/Cornacchia y Chinetti/Lucas y un roadster para el americano Bill Spears.
En las últimas etapas los más veloces 300SL sacaron todo su potencial, siendo Kling el ganador y Lang el segundo, clasificándose tercero Chinetti con un Ferrari 340 México.
Pegaso participó en esa edición con un cupé construido específicamente para la carrera, de portón trasero y barras contra zopilotes en el parabrisas.
Aquel año del ’54 figuraron con particularidad los automotores Ferrari con el piloto Maglioli, ganador absoluto con un tiempo total de 17 horas 40 segundos.
Ese año Ferrari volvería a ganar el título, Lancia la segunda posición y Jaguar la tercera.
Coca Cola patrocinó al Equipo Mexicano conformado por cinco autos Buick Century, conducidos por cinco pilotos mexicanos: Luis Leal Solares, Fernando Razo Maciel, Ricardo Ramírez, Héctor Riva Palassio y Julio Mariscal.
La reputación de los autos Borgward cayó significativamente debido a los malos resultados obtenidos.
Lincoln apenas se salvó gracias a la victoria final de Ray Crawford.