Té verde

Los principales países productores de té verde son China, Japón y Vietnam.

Los tés también pueden tomarse con recetas frías y son una excelente opción para mantener la hidratación en épocas estivales.»[1]​ Se destacan en este sentido el té verde cuando se combina en un blend de té con jugo de limón, menta y jengibre.

El té ha sido utilizado como bebida medicinal para promover la salud en mente y cuerpo durante cinco milenios.

Cuando China fue la potencia naval del mundo (1405-1433), el té estuvo entre las provisiones indispensables de los marineros.

[6]​[7]​[8]​[9]​[10]​[11]​[12]​ El té verde reduciría el estrés y estimularía la producción de ondas alfa.

Los amantes del té verde asocian sus beneficios para la salud con: Sin embargo en los EE. UU.

[19]​ La gran cantidad de catequinas encontradas en el té verde pueden explicar este efecto saludable.

[21]​ Al igual que otras bebidas estimulantes de su categoría el té verde está contraindicado para una serie de patologías y situaciones fisiológicas como son: Dado que el té verde es una bebida ampliamente consumida, generalmente se considera seguro.

[23]​ Por su contenido en cafeína, el té verde puede provocar insomnio, nerviosismo, irritabilidad, alteraciones del sueño, vómitos, diarreas, gases, temblor, acidez, mareos, confusión, aumento de la tensión arterial, zumbidos, etc.[24]​ Además, dado que las bases xánticas tienen una acción diurética, se puede observar un aumento de la producción de orina, pudiendo provocar deshidratación.

En cuanto a su contenido en taninos, si se toman infusiones concentradas o en ayunas, puede provocar náuseas y vómitos, irritando la mucosa del estómago y el colon, aunque este efecto es más marcado en el té negro.

Hojas de té verde
Pila de la variedad Gunpowder marca Twinings (variedad de buen grado de té verde chino).
Pila de té Mao Jian (variedad de alto grado.
Té Longjing, de muy alto grado.
Té verde japonés.
Matcha y warabimochi con kinako y caramelo de azúcar negro.
Genmaicha , té verde con granos de arroz tostados.
Apariencia del té verde en tres distintas presentaciones (de izquierda a derecha): hojas para infusión, hojas secas y el líquido de té. Las hojas para infusión se ven más verdes que las hojas secas.