Aloe vera

De allí habría pasado al latín ălŏē, ēs con la misma acepción, y que, en sentido figurado, significaba también ‘amargo’.[5]​ La palabra griega proviene del Hebreo אֲהָלִים (ʾăhālîm) o ohel (אֹהֶל), frecuentemente citado en textos bíblicos.[10]​ Arbusto acaule o con tallo corto de hasta 30 cm, erecto, sin rebrotes laterales.La planta tiene hojas carnosas triangulares con bordes dentados, flores tubulares amarillas y frutos que contienen numerosas semillas.La floración no se produce hasta los tres o cuatro años de edad.[12]​ Estas plantas presentan polinización cruzada y ornitofilia en su hábitat natural, siendo muy propensas a la hibridación; motivo por el cual, se eliminan las flores en cultivos con fines comerciales.nec non Prodromus Florae Capensis, 83, en 1768[17]​ y por Philip Miller como Aloe barbadensis unos diez días después de Burman en el Gardener's Dictionary.[22]​ La especie se introdujo en China y en varias partes del sur de Europa en el siglo XVII.[33]​ Un sustrato también poroso, como el que se emplea para cactus y suculentas es el adecuado, es conveniente dejarlo secar completamente antes de volver a regar.[30]​ Esta especie se cultiva a gran escala en Australia, Bangladés, Cuba, República Dominicana, China, México, India, Jamaica, Colombia , Venezuela, Kenia, Perú, Tanzania y Sudáfrica, junto con los Estados Unidos para abastecer a la industria cosmética.[40]​ El Aloe vera se cultiva como planta decorativa, para usos medicinales, en cosmética e incluso para la alimentación en algunos países.Dos sustancias del Aloe vera, un gel transparente y su látex amarillo, se utilizan para fabricar productos comerciales.[11]​ Existe evidencia contradictoria con respecto a si el aloe vera es efectivo como tratamiento para heridas o quemaduras.[4]​[26]​[11]​ El gel de aloe vera se usa comercialmente como ingrediente en yogures, bebidas y algunos postres.Si bien las dos últimas pueden tener propiedades medicinales similares, a nivel farmacéutico es importante una correcta identificación de la especie ya que son diferentes.[48]​ La barbaloína un compuesto del aloe vera fue aislado en 1851 por T. y H. Smith de Blandfield Chemical Works en Edimburgo.Actualmente, está muy extendido su uso directo mediante procedimientos domésticos muy rudimentarios, dando lugar a irritación (dermatitis, eccema) o reacciones alérgicas (urticaria),[50]​ cuando no se ha limpiado el gel de Aloe de forma adecuada.[51]​[52]​ De ella se obtienen dos productos: Las hojas deben ser cortadas por la base, cerca del tallo.[56]​ El uso del gel de aloe vera tópico no está asociado con efectos secundarios significativos.[4]​ El gel sin procesamiento industrial puede contener impurezas, ácidos o sustancias que usados por periodos prolongados de tiempo podría causar lesiones en la piel.[2]​[4]​[63]​ Aunque la toxicidad puede ser menor cuando la aloína se elimina mediante el procesamiento, el aloe vera ingerido en grandes cantidades puede inducir efectos secundarios, como dolor abdominal, diarrea o hepatitis.[2]​ No se recomienda el aloe oral durante el embarazo debido a la estimulación teórica de las contracciones uterinas, y en las madres que amamantan, en ocasiones puede causar malestar gastrointestinal en el lactante.
Vista de la planta
Vista en floración
plantas en cultivo industrial
Inflorescencia en detalle. Se aprecian los estambres y anteras sobresaliendo de los pétalos.
Existe una variedad moteada, descrita originalmente como Aloe barbadensis var. chinensis , pero es un mero sinónimo de la especie tipo.
Cápsulas y semillas.
Trozos de gel de Aloe vera
Planta en Costa Rica, zona arida en Sarchi, Alajuela.
Sábila junto a sus hijuelos.