La regionalización realizada en 1976 por la CONARA dividió el país en trece regiones, creando la I región de Tarapacá con base en la antigua provincia homónima, compuesta por los departamentos de Arica, Pisagua e Iquique.
Iquique fue nombrada capital de esta nueva región, a pesar de que Arica era una ciudad más activa comercialmente y más poblada, lo que motivó desde aquella época la lucha política por la reforma a la regionalización actual.
Dicho inciso se refería a los límites proyectados para esta nueva región, y que tuvo origen en una indicación presentada por la presidenta Michelle Bachelet, durante el segundo trámite constitucional del proyecto, en diciembre de 2006, había generado una observación por parte del Perú, en el marco de la controversia sobre los límites marítimos entre ambos países, al considerar "el paralelo del Hito Nº 1 en el Mar Chileno" como inicio de la frontera norte.
Mientras que estas dos provincias se subdividen en cuatro comunas ―Arica, Camarones, Putre y General Lagos―.
Para los efectos de la administración local, las provincias están divididas a su vez en cuatro comunas ―Arica, Camarones, Putre y General Lagos― en total regidas por su respectiva municipalidad.
Esta cordillera no tiene grandes alturas pero cae abruptamente al mar.
Esta depresión es cortada por quebradas, los únicos cauces hídricos de la región, destacándose Azapa, Lluta, Camarones y Vítor.
Acá se encuentran varios volcanes activos que se elevan sobre los 6000 metros de altitud, como el Pomerape, el Guallatiri y el Parinacota que, con 6348 metros, es el punto más alto de la región.
Hay también abundante nubosidad litoral, la cual penetra en las pampas y conforma una espesa niebla conocida en la zona como camanchaca.
En el desierto ocurre algo semejante, pero nunca con temperaturas tan bajas.
Las precipitaciones son prácticamente nulas, pero las pocas existentes ocurren normalmente en la puna andina durante el verano austral (febrero).
Este efecto es conocido como invierno altiplánico o alta de Bolivia.
En el sector costero las temperaturas son gratas, con variaciones diarias y estacionales poco marcadas.
Hacia el interior, considerando como desierto absoluto, la sequedad atmosférica es extrema y las oscilaciones térmicas diarias son muy amplias.
Según los primeros datos aportados por el precenso 2017 del INE, la región está poblada por 226 068 habitantes.