Una mina es un yacimiento de materiales útiles para el ser humano tales como metales (oro, plata, cobre, hierro, etc.), piedras preciosas (diamantes, esmeraldas, zafiros, etc.), sal o combustibles (carbón, petróleo, gas natural).
La mina más antigua conocida en los registros arqueológicos es Lion Cave (Cueva del León), en Suazilandia.
Otros sitios de similar antigüedad son donde los neanderthales habrían extraído el sílex para fabricar armas y herramientas que fueron encontradas en Hungría.
La pólvora negra fue usada por primera vez en minería en un pozo de Banská Štiavnica, Eslovaquia, en 1627.
En este mismo pueblo se estableció la primera academia de minería del mundo en 1599.
Como ejemplos de este tipo de minas se pueden citar algunos casos: Chuquicamata, La Escondida y Pascua Lama (Chile); Ernest Henry (Australia); Riotinto y Tharsis (España); Alumbrera-Pirquitas-Manantial Espejo (Argentina); el Cerrejón (Colombia).
Además produce un importante impacto visual y medioambiental (polvo, ruido, etc.) en la zona en la que se desarrolla, lo cual lleva a un importante rechazo social a su implantación e incluso al cierre de las existentes.
La distribución por país es la siguiente:[cita requerida] Las operaciones básicas en cualquier tipo de mina son tres: arranque (tumbe), carga (rezagado) y transporte (acarreo).
En la mayoría de las ocasiones es necesario, además, romper la roca en trozos suficientemente pequeños para facilitar los procesos posteriores (carga y transporte).
[3] Actualmente se emplea el martillo (hidráulico o neumático) y el zapapico como herramientas manuales..
Las máquinas que se utilizan para el arranque son: En minería subterránea: En minería a cielo abierto: En general, estás máquinas arrancan la roca utilizando elementos móviles cortantes: picas, rodetes, cuchillas o discos.
El transporte es la operación por la que se traslada el mineral arrancado hasta el exterior de la mina.