Tras haber colaborado con Stalin en la derrota de la Oposición Unificada, fue apartado del poder por este en 1929.
[10] Sus bases de poder eran la Comintern y las publicaciones principales del partido, que controlaba.
[18] Los amigos de esta generación que participaron en las actividades revolucionarias en 1905 fueron más tarde sus compañeros en las luchas internas del partido en 1917-1918.
[20] Durante esta época, ya como revolucionario profesional,[4] se dedicó a la organización y la propaganda en su Moscú natal.
[20][4] Su dedicación a la actividad política a costa de sus estudios hicieron que ascendiese rápidamente en la organización del partido y ya en 1908 ingresase en el comité moscovita,[4] el órgano ejecutivo del partido en la ciudad, y uno de los pocos aún no desarticulado por la policía.
[19] Entonces continuó sus estudios —principalmente en economía, sociología y filosofía— que lo convirtieron más tarde en el principal teórico del bolchevismo.
[30] El apoyo de los socialistas alemanes y austrohúngaros a sus Gobiernos fue una sorpresa inesperada, una tragedia.
[30] Fue, sin embargo, por intercesión de estos últimos, que logró su liberación, se pudo trasladar a la neutral Suiza e instalarse en Lausana, donde continuó su estudio de los economistas anglo-estadounidenses y formó un grupo bolchevique que comenzó una nueva publicación Zvezdá (La estrella), mal recibida por Lenin.
[32] En la primavera, contó con el respaldo de Lenin para fundar, junto con Piatakov, una nueva publicación teórica, Kommunist.
[32] En julio de 1915, cruzó Francia y Gran Bretaña —donde se lo detuvo brevemente— con nombre falso para afincarse en Suecia, eslabón crucial en la ruta que comunicaba Rusia con los exiliados durante la guerra mundial.
[34] En abril se lo deportó de Suecia a Oslo por participar en un congreso socialista antibelicista.
UU.,[37] periodo en el que se evitó una ruptura final con Lenin a pesar de las diferencias entre ambos.
[41] Para Bujarin, el capitalismo financiero se había adueñado de los aparatos estatales como instrumentos no solo políticos, sino también económicos; los Estados, controlados por los intereses industriales y bancarios, intervenían cada vez más en la economía, favoreciendo un proceso monopolístico nacional.
[46] El enfrentamiento político no conllevó un alejamiento personal, situación característica en las relaciones de Bujarin.
[46][4] Tras su vuelta a Moscú, se concentró en actividades de propaganda escrita; redactó una miríada[4] de artículos, editoriales, proclamas y manifiestos, que aparecieron principalmente en los diarios del partido en Moscú, Sotsial Demokrat[4] y Spartak.
[48] Al igual que este, durante el periodo interrevolucionario de 1917 se contó generalmente entre la corriente más radical[4] del partido.
[50] Esta confianza en los acontecimientos en Europa tuvo importantes consecuencias para el partido: convirtió en secundarios los programas de desarrollo rural e industrial, concentró la atención del partido en los sucesos europeos y condujo a la defensa de una posible guerra revolucionaria que podría resultar necesaria para ayudar al triunfo del proletariado europeo.
[51] En general, parte de la corriente más radical del partido durante el periodo del Gobierno provisional, en ciertas ocasiones se mostró partidario de las opciones moderadas: no respaldó la insurrección durante las Jornadas de Julio, sostuvo que estas habían supuesto un revés para el radicalismo en el VI Congreso y votó a favor de quemar las cartas en las que Lenin exigía desde su escondite la inmediata insurrección y toma del poder por el partido en septiembre.
[66] De entre sus obras de divulgación, destacó sobremanera el exitoso El abecedario comunista, obra redactada junto con Yevgueni Preobrazhenski para explicar las bases del bolchevismo y que se reeditó en numerosas ocasiones y se tradujo a varios idiomas.
[69] Rechazó, sin embargo, al burocratización del Estado, que temía condujese a la creación de una casta privilegiada.
[69] La inclusión de los campesinos en la nueva economía organizada debía lograrse paulatinamente, por medios pacíficos.
[70] Justificó la posibilidad de implantar el socialismo en sociedades materialmente atrasadas —algo rechazado por la interpretación marxista tradicional— alegando que este surgía allí donde se daba un desarrollo humano (extensión del proletariado), y no material, suficiente.
[80] Entre 1924 y finales de 1926, Bujarin defendió una economía mixta[77] como método de larga transición al socialismo en la que el sector público controlaba los elementos considerados principales (industria pesada, bancos, transporte, comercio exterior, parte del comercio interior y las cooperativas), mientras el privado gestionaba otros menores (la agricultura de los pequeños labradores, las industrias menores, o el comercio privado).
[85] En parte, esto se debía a la debilidad del proletariado, reducido durante la guerra civil y parcialmente convertido nuevamente en campesino.
[121] Este, junto a Rýkov y Tomski, temiendo que la nueva campaña destruyese los cimientos de la NEP al atizar la hostilidad del campesinado, protestaron en el politburó.
[132] En noviembre, Bujarin, Rýkov y Tomski habían quedado reducidos a una minoría impotente en el politburó, incapaces de controlar las decisiones políticas.
[138][139] Esta renuncia llegó, sin embargo, pocos días después, el 25 del mes, en una nota en la que los dirigentes de la derecha admitían su error al oponerse a la corriente mayoritaria.
[144] Alejado del poder, retomó algunas actividades hasta entonces aparcadas, como la pintura o el estudio de Marx.
[148][13][149] Participó en el XVII Congreso con una dura crítica al nazismo y meses después defendió la libertad creativa de los escritores en la URSS.
[171] Finalmente, se le ofrecieron a su esposa cinco ciudades para pasar su exilio interior, de las que eligió Astracán.