[2][3] Sin embargo, la proyección de Jorge Eliécer Gaitán, quien se consolidó como jefe único del Partido Liberal, sumada a la mayoría liberal en el congreso, no permitió a los conservadores desarrollar cabalmente sus políticas.
El objetivo no se logró y Ospina resultó fortalecido, por lo que desarrolló una mayor represión.
[2][4] Por ese motivo, el Partido Liberal no participó de las elecciones de 1950, lo que dejó vía libre para que el conservador Laureano Gómez ganara la presidencia.
[2] Entonces, una parte de la dirigencia liberal ordenó a sus militantes alzarse en armas contra la presidencia de Gómez, lo que dio lugar a lo que se conoció como La Violencia.
El congreso se encontraba clausurado desde 1949, y Rojas gobernó con un órgano legislativo orquestado por él, conocido como la Asamblea Nacional Constituyente(ANAC), que legitimó su ascenso al poder y lo designó como mandatario para los cuatrienios 1954-1958 y 1958-1962 (período que no llegó a ejercer) fue obligado a renunciar el 10 de mayo de 1957, dando paso a un gobierno de transición de la Junta Militar y luego al Frente Nacional (coalición entre liberales y conservadores).
[9][10] Sin embargo los conflictos por las tierras, y la desigualdad social seguirán latentes.
[15] En 1955 se presentó la denominada Guerra de Villarica en el Tolima.
[29] Creó la Confederación Nacional del Trabajo (CNT) y el Movimiento de Acción Nacional (MAN), orientados desde la Oficina de Información y Propaganda del Estado (ODIPE).
[31] Para lograr las metas socioeconómicas,[32] incrementó de inmediato los impuestos del 5% al 14%.