[3] Desde sus inicios, la emisora estuvo vinculada directamente con el modelo de las Escuelas Radiofónicas (EE.RR.
[7][8] Su estabilidad se dio gracias a la colaboración constante que estableció ACPO con los sucesivos gobiernos colombianos, entre el de Mariano Ospina Pérez (1946-1950) y el de Misael Pastrana (1970-1974)[9] y a la combinación del medio radial con el sistema de medios del ACPO.
[11] José Joaquin Salcedo había llegado a Sutatenza desde agosto de 1947, con 26 años y, recién ordenado como sacerdote,[9] rápidamente se instaló una pequeña emisora de radioaficionado apoyado por su hermano Antonio José Tuco Salcedo, quien es un sacerdote jesuita y un técnico radial.
En él se transmitió un programa con música interpretada por campesinos del pueblo.
"[12] Entre 1947 y 1950, el sistema educativo se empieza a constituir; José Joaquín Salcedo realizó un viaje a Estados Unidos en busca de fondos para importar los primeros aparatos radiales.
Entre 1951 y 1960, ACPO puso en funcionamiento los institutos de capacitación en liderazgo, se imprimió las primeras cartillas y se circuló los primeros números del semanario "El Campesino".
[5] En este período también se implementó el intercambio de correspondencia entre la emisora y los estudiantes, dado que ACPO abrió una oficina especialmente dedicada a ello en 1963.
"A través de ella se procuró dar respuesta a la mayoría de textos recibidos y se constituyó lo que podríamos denominar como una "comunidad de intercambio epistolar" entre la entidad y los estudiantes, los auxiliares inmediatos, los representantes parroquiales, los líderes regionales (formados en los Institutos Campesinos) y los párrocos en todas las regiones del país [...] ACPO consideraba que las cartas le permitirían mantener un vínculo con sus usuarios y hacer seguimiento a sus procesos.
[...] La evolución rápida de la sociedad moderna supone el cumplimiento de no fáciles deberes para los cuales el hombre no se ha de considerar preparado si le falta una instrucción básica y una educación suficiente: sin éstas no podrá el ciudadano afrontar las responsabilidades que la participación en la vida familiar, social y política le impone.
[2] Muchas de las cartas recibidas por ACPO son enviadas por los oyentes que, desde las diferentes regiones del país, se referían a las solicitudes de complacencias musicales, se sugirieron cambios en los contenidos, felicitar a los locutores y participar en los concursos.
Desde 1961 y hasta 1973, el sistema se consolidó a como logra expandirse la emisora a todo el territorio nacional y se articulaba con las políticas del Frente Nacional.
[12] Por otro lado, se esperaba que los aparatos sólo permitieran sintonizar las frecuencias de Radio Sutatenza porque, según el padre José Joaquín Salcedo, "se buscaba ofrecer una economía a los campesinos, pues si pudieran sintonizar todas las emisoras, ellos se expondrían a usar los aparatos en las horas libres de la emisora Sutatenza, desgastando inútilmente las pilas.
Pero, además, porque los campesinos no se expondrán a perder las enseñanzas ofrecidas en los programas de las EERR, tratando de escuchar otros, cuando la emisora esté suministrando informaciones".
[7][3] Desde entonces ha comenzado su proceso de catalogación, clasificación y puesta al servicio del público.