Francisco Pacheco

En Sevilla adoptó el apellido del tío y realizó su aprendizaje con el apenas conocido pintor sevillano Luis Fernández.

En 1585 terminada su formación, arrendó una casa en la calle de los Limones, titulándose maestro pintor.

Sus buenas relaciones con el clero, la aristocracia y el poder municipal le proporcionaron una amplia clientela.

Participó en el túmulo levantado en Sevilla para la celebración de las honras fúnebres del rey Felipe II.

En 1610 emprendió un viaje a Madrid que le llevaría hasta octubre de 1611 y en el que hay constancia de su visita a El Escorial y Toledo, donde trató con El Greco.

Sigue las formas de los grandes maestros, pero representa las figuras y ropajes con una dureza estática.

Sin embargo, dada su dedicación al estudio, análisis y explicación del arte, Pacheco influyó mucho en la iconografía de la época.

Juicio Final , óleo sobre lienzo, 338 x 235 cm, Castres , Museo Goya . Contratado en 1610 con Hernando de Palma para la sepultura que este caballero poseía en la iglesia del convento de Santa Isabel de Sevilla y fechado en 1611, el lienzo fue robado por el mariscal Soult en 1810. El propio Pacheco se ocupó extensamente del cuadro en El arte de la pintura , indicando que entre las muchas figuras había incluido su autorretrato en el grupo de la derecha, donde entre una figura entera de espaldas, «mancebo hermosísimo junto a una hermosa mujer (...) puse mi retrato frontero hasta el cuello, pues es cierto hallarme presente este día».
Cristo servido por los ángeles en el desierto , (1615), óleo sobre lienzo, 268 x 418 cm, Castres , Museo Goya . Pintado para el refectorio del monasterio de San Clemente el Real de Sevilla, en los objetos de bodegón sobre la mesa podría advertirse la participación del joven Velázquez , en la que sería la primera obra conservada de su carrera. [ 1 ]
Sueño de José , óleo sobre lienzo, 148 x 84 cm, Madrid , Real Academia de Bellas Artes de San Fernando .
Desposorios Místicos de Santa Inés de 1628, Museo de Bellas Artes de Sevilla .