Estos indígenas fueron sus únicos habitantes hasta la llegada de los colonos occidentales, hacia el final del siglo XIX.Allí se realizaron estudios arqueoantropológicos en un contexto funerario y otro «ceremonial», exhumándose esqueletos humanos con buen estado de conservación, incluso con restos orgánicos adheridos.Luego de que terminaba la ceremonia estas construcciones eran abandonadas a la progresiva destrucción por los elementos naturales.También navegó sus aguas hacia el naciente hasta la longitud de la isla Gable.Sin embargo, el nombre que le daban sus primitivos pobladores, la etnia yámana en su propia lengua era Shumacush.[10] La estancia fue fundada en el año 1899,[11] cuando el pastor, misionero y pionero anglicano inglés John Lawrence (1844 - 1932), su esposa Clara Martín, y sus tres hijos, consiguieron estas tierras por donación legal del gobierno argentino durante la presidencia de Julio Argentino Roca en gratitud a la labor humanitaria desarrollada por él y su familia entre los indígenas isleños desde 1873 en la Misión Anglicana de Ushuaia, a la cual Lawrence renunció al trasladarse a su propiedad.Los Lawrence levantaron casas, galpones de esquila, un aserradero, y rieles que se adentraban 4 km por el valle del río Remolino para aproximar los troncos al aserradero, empleando sólo tracción a sangre, de caballos y hombres.En el extremo de la punta Remolino se levantó una baliza para facilitar la navegación.El aserradero se mantuvo activo de manera concesionada, hasta que en 1958 fue cerrado definitivamente.En 1961 la estancia fue ocupada por el ganadero Manuel Fernández, quien mantenía en estas tierras 400 ovejas, 150 vacunos y 10 caballos.[20] Su casco oxidado se trasformó en un elemento característico de la estancia, consustanciado escénicamente con su paisaje.Su casco se encuentra localizado en las coordenadas: 54°51′39.34″S 67°51′34.69″O / -54.8609278, -67.8596361; cuenta con un puerto, y se sitúa en el sector norte de una pequeña bahía, en la cual desemboca, al este del casco, el arroyo o río Remolino (que nace en la ladera sur de la sierra Sorondo), mientras que al oeste del casco se encuentra la punta Remolino.La estancia cuenta con un sendero de interpretación el cual permite observar diversos ambientes fueguinos con su flora típica.Tal es lo persistente del frío que en pleno verano austral se han registrado eventuales nevadas, o temperaturas de solo -6 °C.Se pasa al sur del faldeo del monte Brown, luego se supera la punta Paraná, hasta finalmente llegar a la Estancia Remolino, lugar donde concluye el camino, si bien está proyectado que el mismo se una con el que desde Ushuaia une la baliza Escarpados y la estancia Túnel.En toda la ruta 30 los bosques y costas que la limitan son adecuados para el avistamiento de aves, destacando las especies marinas.En el trayecto se pueden contemplar distintas vistas del canal Beagle, y de la chilena isla Navarino.[26] También puede hacerse por vía marítima, observando la estancia y su casco en la excursión a la pingüinera de la isla Martillo,[27][28][29] o desembarcando en el Puerto Remolinos.
Casco de la Estancia Remolino.
El vapor de carga y pasajeros "Monte Sarmiento", el cual naufragó en el año 1912 en las aguas del
canal Beagle
, frente a la Estancia Remolino.
Pecio "Monte Sarmiento" frente a la Estancia Remolino.