El pasaje describe una confrontación de Jesús con los escribas y fariseos sobre si la mujer debería ser apedreada.[7] También la frase idiomática "tirar la primera piedra", y su correspondiente en otros idiomas europeos como en inglés "cast the first stone",[8] derivan de este pasaje.El primer manuscrito en griego que llegó a nuestros días y que contiene esa perícopa es el Códice de Beza en bilingüe griego/latín, de finales del siglo IV a principios del siglo V.El libro II es generalmente fechado de fines del siglo III (Von Drey, Krabbe, Bunsen, Funk).[9] El Codex Fuldensis, que es afirmativamente fechado del año 546 contiene la pericope adulterae.Sin embargo la epístola cita a partir de los escritos del siglo VIII y no se considera genuina.[11] Hasta hace poco, no se consideraba que algún padre de la Iglesia griega tomara en cuenta el pasaje antes del siglo XII; pero en 1941 se descubrió una colección numerosa de los escritos de Dídimo el Ciego (313 - 398 d. C.), incluyendo una referencia a la pericope adulterae como se encuentra en varios ejemplares; ahora se considera comprobado que este pasaje estuvo presente en su lugar usual en algunos manuscritos griegos conocidos en Alejandría, y en otros lugares a partir del siglo IV.Jerónimo de Estridón informa que la pericope adulterae no se encontraba en su lugar usual en "varios manuscritos griegos y latinos" en Roma y en el latín occidental a finales del siglo IV.El primero en aplicar sistemáticamenta las marcas diacríticas de los críticos alejandrinos fue Orígenes:[13] La crítica textual antigua se familiariza con el uso y significado de esas marcas en las obras griegas clásicas como Homero, e interpreta los signos que indican que la sección de Juan 7:53-8:11 fue una interpolación y no una parte original del evangelio.Ya en la época moderna y comenzando con Lachmann (Alemania, 1840), se pusieron de manifiesto reservas fuertemente argumentadas respecto de la perícopa, que fueron llevadas al mundo inglés por Samuel Davidson (1848–1851), Tregelles (1862),[14] y otros.El argumento en contra de los versículos tomó cuerpo y alcanzó su expresión final con Fenton John Anthony Hort (1886).Hay leyes y ese asunto del que escribió Pilato, el rey de los judíos.Ambos, el El Nuevo Testamento griego (NA27) y las Sociedades Bíblicas Unidas (UBS4) proveen texto crítico para la perícopa, pero marcan esta con [[corchetes dobles]], indicando que la perícopa se considera como una adición posterior al texto.[23] 8:3 – επι αμαρτια γυναικα ] γυναικα επι μοιχεια – D 8:4 – εκπειραζοντες αυτον οι ιερεις ινα εχωσιν κατηγοριαν αυτου – D 8:5 – λιθαζειν ] λιθοβολεισθαι – K Π 8:6 – ενος εκαστου αυτων τας αμαρτιας – 264 8:6 – μη προσποιουμενος – K 8:7 – ανακυψας ] αναβλεψας – Κ Γ ] U Λ f13 700 8:8 – κατω κυψας – f13 8:8 – ενος εκαστου αυτων τας αμαρτιας – U, 73, 95, 331, 413, 700 8:9 – και υπο της συνειδησεως αλεγχομενοι εξρχοντο εις καθ' εις – K 8:9 – εως των εσχατων – U Λ f13 8:10 – και μηδενα θασαμενος πλην της γυναικος – K 8:11 – τουτο δε ειπαν πειραζοντες αυτον ινα εχωσιν κατηγοριαν κατ αυτου – M
Juan 7:52–8:12 en el
Códice Vaticano Griego 1209
(
c
. 350): en la línea 1&2 termina 7:52; en la línea 3&4 inicia 8:12.
Papiro 66
con el texto del
Evangelio de Juan
7:52; 8:12-16. Se observa con claridad como el manuscrito saltea el pasaje referido a Jesús y la mujer sorprendida en adulterio (Juan 7:53-8:11).