Codex Ephraemi Rescriptus

Este códice recibe su nombre de los tratados, 38 sermones, de San Efren el Sirio (traducido al griego) que se sobreescribieron (rescriptus) al texto original durante el siglo XII, eliminando parcialmente la escritura anterior, lo que formó un documento palimpsesto.[2]​ Se cree que originalmente el códice contenía una biblia completa, aunque hasta nuestros días solo sobreviven únicamente 64 hojas del Antiguo Testamento, escrituras hebreas, (parte del Eclesiastés y el libro de la Sabiduría, algunos fragmentos de los Proverbios y los Cánticos) y 145 hojas del Nuevo Testamento, escrituras griegas, pero sin encontrarse ningún libro completo.Es interesante mencionar que los textos del nuevo testamento están muy mezclados; parece que el escriba copió los textos de diferentes manuscritos, estando en algunas partes de acuerdo con el estilo alejandrino y más frecuentemente con el estilo Sirio.Se llegaron a utilizar métodos químicos para hacer que destacara la tinta original pero los resultados fueron escasos.En 1843 Tischendorf publicó una parte de los textos descifrados y dos años más tarde, en 1845, el resto.
Codex Ephraemi Rescriptus de la Biblioteca Nacional francesa.
Matt. 1,2-18 (Tischendorf facsimile)