[3] Fue un cubil de hienas usado durante el último interglaciar, el Eemiense (o Riss-Würm), un periodo cálido hace entre 100 000 y 90 000 años.
[4][5] Las primeras excavaciones proporcionaron abundantes restos de fauna y dos dientes humanos, atribuidos inicialmente a preneandertales.
Los dos primeros son depósitos fluviales con arenas, gravas y arcillas asociados al arroyo cercano.
[5] Otros dos sectores, «Diaclasa Roja» y Sur también han proporcionado restos fósiles, pero menos abundantes que en los anteriores.
[5] En el nivel 5 del sector Norte se ha obtenido una datación por termoluminiscencia de 90 961±7881 años.
Asimismo, tanto los macro como los micromamíferos indican un ambiente cálido, no hay prácticamente representantes de climas fríos.
[5] El conjunto refleja el final del periodo interglaciar Eemiense y el anuncio de un nuevo ciclo glacial.
[8][7] Destacan los mamíferos herbívoros, mientras que los carnívoros son anecdóticos: Dama dama, Cervus elaphus, Bos primigenius, Equus caballus, Stephanorhinus hemitoechus, Vulpes vulpes, Leporidae indet., Chelonia indet.
duodecimcostatus, M. arvalis y M. agrestis, aunque en el nivel H el taxón dominante es el topillo de Brasov (Pliomys coronensis).
La composición faunística, aún en estudio, parece similar a la de la Cueva del Camino, predominando los herbívoros y destacando entre los micromamíferos los topillos Microtus gr.
[1][5] Fruto de estos trabajos resultaron numerosas publicaciones científicas y comunicaciones a congresos internacionales.
[1] En septiembre de 2015 se inauguró el denominado «parque arqueológico "Valle de los Neandertales"», con paneles explicativos in situ y visitas guiadas, abriendo los yacimientos al público no especializado.