En cuanto a diversidad étnica, está habitada por ucranianos (lemkos, boikos, hutsules), húngaros, eslovacos, rumanos, búlgaros y rusos.
[2] En los siglos VII y VIII, una población más densa conocida como los Croatas blancos se habían asentado en las laderas de los Cárpatos.
La nobleza eslava local a menudo se casaban con los nobles húngaros en el sur.
Durante ese período, un importante factor en la identidad cultural de los rutenos resultó ser la religión.
La popularidad de esta medida entre la población campesina es discutible; la autonomía era claramente lo que más importaba a los rusinos.
Durante los meses siguientes, los consejos se reunían cada pocas semanas, exigiendo soluciones diferentes.
El gobierno americano les comunicó que la única opción viable era la unificación con Checoslovaquia.
En 1920, el área fue utilizada como un conducto para armas y municiones para los polacos antisoviéticos combatientes en la Guerra Polaco-Soviética directamente al norte, mientras que los comunistas locales sabotearon los trenes y trataron de ayudar al lado soviético.
[9] En mayo de 1919, un Consejo Nacional Central reunido en los Estados Unidos dirigido por Zatkovich votó unánimemente por aceptar solución checoslovaca.
El escritor izquierdista húngaro Béla Illés afirmó que el encuentro no había sido más que una "farsa", en la que unos cuantos "notables" habían sido sacados por la policía de sus casas, para formar una "Asamblea Nacional" sin legitimidad democrática y para obligarles a respaldar la incorporación de la región a Chechoslovaquia.
Aseguró que Clemenceau había dado instrucciones personalmente al general francés sobre el terreno, con el fin de que la zona quedase incorporada a Checoslovaquia "a toda costa" y se estableciese un territorio tampón, que separase la Ucrania soviética de Hungría, como parte de la política francesa anticomunista del "cordón sanitario".
A pesar de que fueron los propios rusinos los que habían llegado a la decisión de unirse al Estado checoslovaco, es discutible si su decisión tuvo alguna influencia en el resultado[cita requerida].
Ucrania fue vista como políticamente inviable, y Rusia se encontraba en medio de una guerra civil.
[13] Miles de profesores, policías, empleados y empresarios checos fueron trasladados a la Rutenia Sucarpática.
Este último en 1991 se convirtió en el estado independiente de Ucrania, con Cárpato-Rusia como parte integrante.
El partido solicitó al presidente Víktor Yúshchenko y a su primera ministra Yulia Timoshenko que realizaran una valoración política de los sucesos en Transcarpacia y Crimea, al Consejo de Seguridad Nacional y Defensa que redactase un plan para limitar las acciones separatistas, y al Ministerio de Exteriores que declarase a todo ciudadano que participase en el Congreso del 25 de octubre persona non grata en Ucrania.
Sin embargo, debido al aislamiento geográfico y político del principal territorio de habla rutena, los habitantes desarrollaron rasgos distintivos.
Además, entre los siglos XII y XV, el área fue colonizada por grupos válacos que fueron asimilados por la población local eslava e influenciaron fuertemente su cultura, por lo que son más distintivos de otros rutenos.
Durante el siglo XIX y la primera parte del XX, los habitantes de Transcarpatia se llamaban a sí mismos «rutenos» (rusyny / rusinos).
[20] Unos pocos se trasladaron a las ciudades de la región, donde surgió la intelectualidad rusina, principalmente del clero católico griego.
A principios del siglo XX, la nobleza y la clase media en la región eran casi en exclusiva de habla húngara.
Las políticas pro-nazi del gobierno húngaro posteriormente resultaron en el exterminio y la emigración de judíos de habla húngara, y otros grupos que vivían en el territorio fueron diezmadas por la guerra.
Memorias y estudios históricos proporcionan muchas pruebas de que en el siglo XIX, las primeras relaciones rusino-judías fueron en general pacíficas.
En 1939, los registros del censo mostraron que 80.000 Judíos vivían en la provincia autónoma de Rutenia.
Durante la Holocausto, en las ciudades de la Rutenia subcarpatiana se establecieron 17 guetos, desde donde todos los judíos fueron llevados a Auschwitz para ser exterminados.
Son, con mucho, el grupo étnico más pobre y menos representado de la región.
Los años transcurridos desde la caída del comunismo no han sido amables con los gitanos de la región, puesto que se han visto especialmente afectados por los problemas económicos que enfrentan los pueblos de toda la antigua Unión Soviética.
Para los escritores urbanos del siglo XIX, Rutenia, una parte olvidada de Hungría, fue en un origen en el siglo XIX la imaginaria "Ruritania" la más rural, rústica y profundamente pequeña provincia perdida en montañas forestales jamás imaginadas.