En la costa caribeña neogranadina, Santa Marta era el bastión realista y su rival, Cartagena de Indias, el patriota.
[9] Pero estos últimos, al contrario de los samarios, jamás se enlistaron en las milicias.
[12] Tras la caída definitiva de Riohacha un año después surgieron numerosas guerrillas en la región.
[nota 1] Su hijo había sido arrestado y fusilado en Fonseca por los patriotas cuando intentaba buscar aliados para su guerrilla.
[18] Los que vivían en la zona entre el istmo y la orilla norte del río Ranchería[19] estaban más mestizados e involucrados en la política criolla que sus parientes del norte de la península de la Guajira.
[36] El historiador ecuatoriano Pedro Fermín Cevallos dice que los monárquicos eran 3000 a 4000 hombres al asaltar Santa Marta.
[37] De todas formas, Dulcino, como Gaira, fue ocupado sin luchar por indios mal armados, algunos a caballo, dirigidos por Bustamante y Labarcés.
[44] En cambio, Restrepo afirma que el gobernador, el coronel, el capitán Tátis con su artillería y algunos refugiados veteranos se refugiaron en el Santa Bárbara, pero los realistas usaron una culebrina para forzarlos a huir por mar al fuerte Betín y después al pueblo de Tabanga, siempre bajo constante acoso desde la costa.
[45] El 4 de enero toda resistencia se acabó y tanto Rieux como Carmona habían sido capturados.
[46] Los funcionarios y partidarios del gobierno republicano lograron embarcarse horas antes del asalto, lo que no impidió que indios, negros y mulatos sacaran las casas de los patriotas más reconocidos o los edificios públicos, luego se alzó la bandera realista.
Para detener el caos, los vecinos nombraron gobernador al catalán Vicente Puyals, quien reinstauró el orden, fortificó la ciudad, hizo respetar la vida de los prisioneros (Rieux fue embarcado para Jamaica) y pedir ayuda a Maracaibo y Cuba.
Los realistas de Bustamante fueron dispersados con fuertes bajas, los republicanos solo tuvieron 9 muertos y 47 heridos.
El coronel patriota logró vencer a los rebeldes, pero no pudo acabar con ellos porque conocían mejor el terreno y se ocultaron.
[48][42][52] Mientras tanto, Pedro Fiallo, un oficial español que vivía oculto, organizó una partida de 200[52] a 800[48] rebeldes y puso a Valledupar bajo asedio, pero fue expulsado por los comandantes Camilo Mendoza y Eustaquio Valle.
Poco después el jefe guerrillero de Moreno, Rafael Rodríguez, era capturado por Sardá y también estuvo a punto de atrapar a Miguel Gómez, pero este último se salvó lanzándose por un precipicio.
[58] Eran dos columnas, la primera la formaban 600 soldados al mando del coronel Narciso López por el camino a Perijá y la segunda eran 400 hombres dirigidos por el teniente coronel Antonio López de Mendoza por el camino de la Guajirá a Riohacha.
[59][60] A su paso, los realistas capturaron los pueblos de Tablazo, Villanueva, Uramita y San Juan, donde se les sumaron 300 reclutas.
Los monárquicos estaban cerca de Riohacha cuando se enteraron de que Santa Marta fue sometida, Montilla salía a enfrentarlos[59] y que el coronel Carmona pretendía envolverlos y cortar su retirada con 600 soldados.
[61] Decidieron retirarse pero fueron permanentemente acosados por el coronel José Sardá hasta Agua del Monte.
[62] Los reclutas que se habían sumado a la tropa realista en el camino fueron duramente castigados.
[66] Otro factor en la derrota del movimiento insurgente fue que sus cabecillas siempre esperaron auxilios de Morales pero Montilla lo impidió.