Por su lealtad a Carrera no se unió al Ejército de los Andes,[nota 2] que partió en campaña hacia Chile, y se dirigió, en cambio, hacia Buenos Aires.
[13] Luego actuó en los poblados de la llanura y de entre los ríos Ñuble y Itata, apoyando a algunas partidas patriotas que se enfrentaban a las guerrillas realistas que hostilizaban la zona.
[16] El 20 de septiembre concurrió con la caballería a un exitoso enfrentamiento entre los vados de Curanilahue y el río Laja, a las órdenes del comandante Pedro Andrés del Alcázar.
Su conducta lo ha hecho acreedor al aprecio de todo el ejército y a una distinción particular.
que solo la consideración del amor patrio me hace desprenderme de este oficial que tiene mi estimación más deferente y mi más absoluta confianza.
El entonces capitán Manuel Jordán y otros individuos acusados de conspirar fueron desterrados a la Nueva Granada, siendo embarcados en el bergantín Pueyrredón que se dirigió a San Buenaventura.
[23] Las reclamaciones realizadas por su familia y también por Joaquín Mosquera, ministro plenipotenciario acreditado en Chile por la Gran Colombia, no sirvieron para ponerlo en libertad.
[23] No obstante, logró fugarse del lugar en el que se encontraba detenido por medio de un ardid y su agilidad.
[23] Luego huyó al sur ante la persecución del gobierno de O'Higgins y se reunió a orillas del río Maule con el general Freire, siendo incorporado a su ejército con vítores de sus antiguos camaradas.
[24] Posteriormente, fue designado comandante del Regimiento Dragones de la República, y se le envió de guarnición a Talcahuano, en donde poco después es nombrado gobernador militar del lugar.
[24] Nuevamente volvió a involucrarse en la guerra contra los realistas en el sur de Chile.