Se creó una comisión para investigar si algunas personas podrían ser responsabilizadas por el fiasco sueco en la batalla de Öland y otras derrotas más importantes durante la guerra.
Aunque nadie se dictaminó oficialmente responsable, Creutz ha sido culpado por muchos historiadores por el hundimiento del Kronan debido a su falta de experiencia naval y mando.
El movimiento fue la ambición real en una sociedad que ya estaba altamente militarizada y orientada a la guerra, un estado fiscal militar.
[3] Inglaterra también envió una flota en noviembre del mismo año para ayudar a Suecia a mantener el impuesto en el estrecho que separa la isla danesa, Selandia (Sjælland), de Escania (Skåne), fuera del control danés y holandés.
Hubo algunos éxitos en la política exterior, en particular la posición antifrancesa con la Triple Alianza de Inglaterra, Suecia y la República Holandesa.
La marina sueca carecía de oficiales profesionales; mientras que la danesa tenía veteranos como Cort Adeler y Nils Juel.
[8] Durante la primera mitad del siglo XVII, los buques de guerra suecos fueron construidos con procedimientos holandeses; con una parte inferior plana y rectangular con un pequeño calado.
Este estilo de construcción naval fue adaptado principalmente para los buques más pequeños en las aguas costeras poco profundas de los Países Bajos, y habilitados para una construcción rápida; sin embargo, estos buques menos robustos eran generalmente inadecuados para fines militares y también eran algo inestable en los mares agitados.
Cuando el Kronan fue construido, era el tercero o cuarto barco más grande del mundo, pero a medida que la tendencia se inclinó hacia barcos grandes, fue superado por otros buques de guerra de gran tamaño.
Ambas obras fueron encargadas muchos años después del hundimiento para conmemorar la victoria de Dinamarca.
[17] Los arqueólogos no han podido recuperar suficientes esculturas del Kronan para una reconstrucción detallada de la ornamentación.
A bordo se encontraban representantes masculinos de ambas clases, alta y baja.
El ejército sueco había introducido recientemente uniformes estandarizados, algo que todavía era poco común en la mayor parte de Europa.
Los oficiales mantenían una gran colección de ropa fina para su uso a bordo, pero no se sabe si era utilizada durante el trabajo diario.
Existía gran potencial para la victoria ya que la flotilla estaba equipada con varios barcos grandes bien armados: Svärdet ("La Espada") de 1800 toneladas, Äpplet ("El Orbe ") y Nyckeln ("la llave"), ambos de 1.400 toneladas, y finalmente el enorme Kronan (" La Corona ").
Contemporáneos daneses describen con desdén las tripulaciones de la marina sueca, tal como meros "peones sumergidos en agua salada".
Sin embargo, a principios de 1676 lo reemplazó por Lorentz Creutz, un prominente funcionario que fungía como tesorero oficial.
Una fuerza de Dinamarca había logrado llegar a las aguas abiertas más lejos y observar los barcos suecos inmovilizados desde la distancia.
Se dirigió hacia Bornholm para unirse con una pequeña escuadra danesa-holandesa en un cruce entre Scania y la isla de Rügen para evitar que cualquier refuerzo marítimo sueco llegara a Pomerania.
Los oficiales suecos formaron una línea de batalla que se mantenía unida con gran dificultad.
[36] Alrededor del mediodía, a cierta distancia al noreste de Hulterstad, la flota sueca hizo lo que el historiador militar, Ingvar Sjöblom, ha descrito como "una maniobra ampliamente debatida".
Muchos de los restos tenían laceraciones profundas sin cicatrizar en cráneos, vértebras, costillas y otras partes del cuerpo.
La osteóloga Ebba Düring, ha sugerido que la disciplina y la cohesión social se derrumbaron durante el hundimiento.
[43] El cuerpo de Lorentz Creutz también fue identificado y llevado a su estado natal, Savolaks, en Finlandia, donde fue enterrado.
El rey Carlos quería saber si Bär y otros oficiales eran culpables de cobardía o incompetencia.
[50] Los oficiales Anders Homman y Olof Norman, quienes sobrevivieron al Svärdet, afirmaron que solo Creutz como comandante de la flota podría haber tomado tal decisión y que Uggla solo estaba siguiendo el liderazgo del Kronan.
[54] El historiador Gunnar Grandin, ha sugerido que la intención de la maniobra era tomar ventaja sobre la flota aliada, pero que muchos de los oficiales del Kronan se opusieron a la idea; Creutz y Björnram instaron a que la nave girara rápidamente para obtener una ventaja táctica mientras Ankarfjäll y Gabrielsson se mostraron preocupados por la seguridad inmediata del buque.
[56] Creutz también era único como comandante supremo de la marina ya que no tenía experiencia en asuntos militares.
[57] El arqueólogo marítimo Lars Einarsson, ha sugerido que "el temperamento colérico y deliberado" de Creutz probablemente jugó un papel importante, pero que igualmente podría ser atribuido a una tripulación sin formación y sin experiencia, aunado de la discordia abierta entre los oficiales.
Durante los años 1950 y 1960, el equipo buscó fuera Hulterstad; más tarde siguió con escaneos de sónar.