Esta solemne coronación significaba la legalización del levantamiento iniciado en 1341 y un claro desafío a los derechos de Juan V al trono.Tesalónica se había declarado desde 1342 a favor del partido de Juan V en la guerra contra Cantacuceno.Poco después, llegó el emperador Juan VI Cantacuceno, acompañado de tropas mercenarias turcas.El momento no podía ser más propicio para Juan VI, que utilizó como argumento el ataque de Juan V para despojarle de su derecho al trono y coronar a su hijo Mateo (1353).Las numerosas razzias turcas hacían cada vez más impopular al emperador Juan VI.Comenzaba en estos momentos la instalación firme de este pueblo en suelo europeo.La población de Constantinopla fue presa del pánico, creyendo que la misma capital estaba amenazada: la situación de Juan VI era insostenible y Juan V aprovechó la situación para recuperar el trono.Para ello Juan V estaba dispuesto a sacrificar la fe de su pueblo y convertirse al catolicismo.Allí el emperador tuvo problemas para pagar las deudas que había contraído con algunos banqueros venecianos, lo cual le impidió emprender su viaje de regreso a Constantinopla.Juan V pidió ayuda en vano a su hijo primogénito Andrónico IV, que se había quedado como regente en Constantinopla.Fue su hijo, Manuel II, entonces gobernador de Tesalónica, quien acudió hasta Venecia para pagar las deudas del emperador y permitir su regreso.A su llegada a la capital, Juan V tomó medidas contra su hijo, ordenando el arresto de algunos aristócratas, que debían constituir el círculo próximo del joven Andrónico IV.La política imperial puso además gran empeño en recuperar el estado productivo de las tierras, para ello lo más importante fue la construcción de fortificaciones en el campo que protegían a los campesinos y las cosechas.Aunque el hundimiento del poder serbio en Macedonia beneficiaría en un primer momento a los bizantinos, que llegaron a recuperar una parte de esta provincia, la presión turca sobre los restos bizantinos fue cada vez mayor.La guerra entre los dos emperadores duraría dos años, hasta 1381, fecha en la cual los dos rivales llegaron a un acuerdo con la mediación de los genoveses.Por su parte, Manuel II perdía sus derechos y su calidad de coemperador: humillado por el términos del acuerdo, abandonó en secreto la capital y se fue a Tesalónica donde se autoproclamó emperador independiente.Después de su llegada a Tesalónica, Manuel II se declaró en completo desacuerdo con la política oficial del Imperio, que buscaba una cohabitación pacífica con los turcos.El joven Emperador inició una política agresiva contra los otomanos en Macedonia: sus primeras acciones se saldaron con sonados éxitos de las tropas bizantinas, que fueron celebrados por los contemporáneos.La situación se tornó pronto en desastre: los bizantinos fueron aplastados en una batalla ocurrida a las afueras de Tesalónica.Al final, Manuel II capituló y en 1387 la segunda ciudad del Imperio pasó a manos de Murad I.Manuel II recuperaba así su condición de heredero al trono y Juan VII regresaba a Selymbria, cuyo gobierno le fue acordado por mediación del sultán.En los últimos meses de su vida, Juan V tuvo que aceptar que su hijo acompañase a Bayaceto I durante sus campañas en Asia Menor, como ya lo había hecho Andrónico IV, en calidad de vasallo turco.Un mes más tarde, Manuel II llegó a Constantinopla, proclamándose único heredero al trono.