[11] El ministro del Interior, Mario Fernández, declaró en una interpelación ante el Congreso Nacional el 23 de enero que «No estoy dispuesto en descartar que haya intencionalidad humana», dejando en manos de las policías —Carabineros y PDI— la investigación de los eventuales delitos vinculados a la catástrofe.
[14] La propagación del fuego se vio potenciada por las condiciones climáticas que otorga la temporada estival en Chile, que se han denominado el «factor 30-30-30», con temperaturas superiores a los 30 grados centígrados, baja humedad del aire (alrededor de un 30 %) y vientos de 30 kilómetros por hora.
[1] El detalle por región de la temporada 2016-2017 es:[nota 1] El incendio denominado «Las Máquinas» que afectó a las comunas de Empedrado, Constitución y Cauquenes en la región del Maule es considerado el incendio más grande registrado en la historia reciente de Chile con 183 946 hectáreas consumidas.
[20] El siniestro llamado «Nilahue Barahona», que afectó a Pumanque, Marchigüe, Pichilemu, La Estrella y Litueche, en el secano costero de las provincias de Colchagua y Cardenal Caro, consumió alrededor de 20 000 hectáreas en sus primeras 48 horas.
[41] Al día siguiente, Bachelet viajó a Pumanque, una de las comunas más afectadas por la catástrofe.
[42] El 25 de enero, el Gobierno designó a tres ministros para viajar a las tres regiones más afectadas: para O'Higgins, el ministro de Agricultura, Carlos Furche; para el Maule, el ministro de Defensa Nacional, José Antonio Gómez; y para el Biobío, el ministro de Obras Públicas, Alberto Undurraga.