[1][2] Representa a la diosa en movimiento, con la mano izquierda descansando sobre la cornamenta de un pequeño ciervo y la derecha en su carcaj.
Se puede observar que la mano izquierda sostiene un arco, aunque falta parte del mismo.
El brazo izquierdo fue totalmente restaurado y reposa sobre la cornamenta del ciervo, que también es un añadido moderno.
Diana viste un quitón corto dorio, un peplo alrededor de la cintura y sandalias.
Está coronada con una diadema y su cabello ondulado queda recogido en la parte trasera de la nuca.
El pedestal fue diseñado por Pierre Briard, y el conjunto se instaló en un parterre rodeado por una orangerie.
[14] El original se atribuyó durante mucho tiempo a Leocares basándose en una comparación con el Apolo de Belvedere del museo Pío-Clementino en el Vaticano, con el cual comparte su representación en movimiento y la composición en forma de X.
Además, en el inventario de Leocares no se menciona ninguna Artemisa en movimiento.
[9] Se ha propuesto más recientemente la atribución de la obra a Praxíteles, basándose en el quitón corto que viste la diosa, ya que no se trata de una vestimenta apropiada para la caza.
La diadema característica que lleva la Artemisa de Versalles estaría igualmente relacionada con este culto.
Por tanto, es difícil sacar una conclusión a partir de esta única teoría.
La diosa no lleva sandalias sino botas, y su mano derecha reposa sobre un ciervo parcialmente conservado, tras el cual corre un perro de menor tamaño.