Dialéctica
Originariamente, designaba un método de conversación o argumentación análoga a lo que actualmente se llama lógica.De esta confrontación surge, en un tercer momento llamado síntesis, una resolución o una nueva comprensión del problema.El término adquiere un significado no circunscrito al ámbito de la retórica gracias, fundamentalmente, a los escritos del filósofo alemán G.W.F.Esta obra se inicia con una afirmación provocativa: "La formulación dialéctica negativa atenta contra la tradición".Para el hinduismo, la diversidad de cosas y eventos contradictorios que nos rodean son justamente las diferentes manifestaciones del todo, llamado Brahman.En los diálogos platónicos tempranos, el procedimiento permite someter a examen cierto conjunto de creencias que mantiene determinado individuo.Estas preguntas son, pues, críticas y comprometedoras, y puede considerarse que equivalen a objeciones; pues naturalmente, una teoría que muestra ser contradictoria no podría aceptarse como verdadera (Vg., ha sido refutada).La refutación (en griego: elenchô) se convierte en un método de prueba (Vlastos, G. Socratic Studies, Cap.En todo caso, la dialéctica (i.e., la controversia, y más fundamentalmente, la exposición a la crítica) queda perfilada por él como un procedimiento de investigación.Es decir que según Hume, toda prueba científica o filosófica debe ser construíble en su integridad desde un único punto de vista.Son 1) la argumentación ex concessis, según la cual es lícito razonar a partir de los presupuestos o premisas del antagonista, sin que en suma, haga falta justificarlas (al menos, no de cara a ese mismo contrario).Si el interesado lo consigue, con ello transfiere a su adversario la obligación (o carga) de responder, argumentando en contra suya.Para Immanuel Kant la sensibilidad tiene como formas a priori el espacio y el tiempo y la razón humana tiene, también anteriores a toda experiencia, un conjunto de categorías para concebir los objetos, siempre que haya fenómenos sobre los cuales ellas puedan actuar.El llamado materialismo dialéctico de Marx es con frecuencia considerado como una revisión del sistema hegeliano.La palabra dialéctica adopta el sentido de esa contradicción entre ideas usualmente filosóficas, sociales o históricas.Si bien Hegel nunca usó los términos tesis, antítesis y síntesis, diversos analistas posteriores popularizaron esta terminología (debida a H. M. Chalybäus) para analizar el desarrollo de la dialéctica hegeliana de una idea o tesis.La imaginación corriente capta la identidad, la diferencia y la contradicción, pero no la transición de lo uno a lo otro, que es lo más importante, cómo lo uno se convierte en lo otro.Por lo que se refiere a la naturaleza del concepto, el análisis es lo primero, porque debe elevar la materia dada a la forma de abstracciones universales, las cuales luego mediante el método sintético son puestas como definiciones.Ello puede ocurrir de varios modos, entre los cuales sobresalen dos: como un intento de suplementar y sistematizar el marxismo en forma distinta del conglomerado hoy tradicional «Marx-Engels-Lenin», o «marxismo-leninismo»; o bien como una posibilidad para el futuro, cuando se haya «absorbido» por completo la razón analítica y positiva que se supone caracteriza aún las ciencias y éstas puedan constituirse dialécticamente, o materialística-dialécticamente.La dialéctica de la Naturaleza procede según las tres grandes leyes dialécticas: Negar que hay contradicciones en la Naturaleza es, según Engels, mantener una posición metafísica; lo cierto es que el movimiento mismo está lleno de contradicciones.En la Dialéctica de la Naturaleza, Engels se manifestó en desacuerdo con considerar la necesidad o lo necesario como lo único interesante desde el punto de vista científico y el azar o lo casual como indiferente para la ciencia, pues así "cesa toda ciencia, ya que ésta debe precisamente investigar lo que no conocemos".La naturaleza se ha desenvuelto "más o menos accidentalmente, pero con la necesidad que es también inherente a la casualidad".Son muchas las discusiones sobre la autonomía o heteronomía de la lógica formal dentro del materialismo dialéctico.Estas no son símbolos o cifras, sino reflejos de «la realidad (material) misma».Esto no quiere decir que las percepciones, o las sensaciones, describan el mundo real físico tal como este es.Esto parece convertir el materialismo dialéctico en una ideología cuya verdad depende de la situación histórica.En ocasiones se ha procurado resolver el conflicto entre los dos componentes del materialismo dialéctico acentuándose los aspectos «prácticos».En ella, Sartre se preguntaba cómo constituir una antropología estructural e histórica, que no sacrifique la concreción del objeto estudiado en un sistema fijo de conceptos.¿O bien la racionalidad positivista de las ciencias es suficiente para estudiar al hombre y a la existencia humana?Un desarrollo extensivo que muestra como la dialéctica emana de los sistemas dinámicos puede consultarse en el libro recientemente publicado "Dialectique dans les sciences et systèmes dynamiques" (ver Bibliografía, fuentes segundarias).