Materialismo histórico

La «concepción materialista de la historia» o «materialismo histórico» (términos acuñados por Friedrich Engels y el marxista ruso Gueorgui Plejánov), también abreviado como Hismat (en contraste al Diamat o materialismo dialéctico), alude a las doctrinas y al marco conceptual creado por el filósofo Karl Marx y después usado por Engels[nota 1]​ y Plejánov para comprender la historia humana.

Aunque el materialismo histórico se halla estrechamente ligado al marxismo; historiadores, sociólogos e intelectuales no ligados al marxismo han tomado elementos de aquel para elaborar sistemas y enfoques materialistas para el estudio de la historia.

Con este planteamiento, el comunismo podía concebirse como necesidad histórica en vez de como aspiración utópica, ya que las mismas contradicciones internas del capitalismo generaban la necesidad de revolucionar las relaciones de producción burguesas y creaban al sujeto histórico capacitado para tal misión: el proletariado.

En su obra Del socialismo utópico al socialismo científico de 1880,[14]​ dice: Sin embargo, ya en vida de Marx hubo epígonos que distorsionaron esta concepción convirtiéndola en un mero determinismo económico.

Engels denuncia esta situación en su carta a Joseph Bloch de 1890, en la cual, si bien reivindica que la causa última de los cambios sociales se encuentra en las condiciones económicas, esto no significa que esta influencia sea unilateral e inmediata ni que pueda explicarse cada cambio social a partir de la economía.

Debido al intento de establecer las ideas del materialismo histórico de modo independiente a la versión marxista del mismo, se han acuñado términos nuevos como: materialismo cultural, funcionalismo ecológico, determinismo geográfico, determinismo económico, y otros, que pueden ser considerados como concepciones materialistas de la historia.