Esta devoción todavía presente en personas de mediana edad, común a todo el Sureste, queda patente en estas coplas del aguilando de Vélez-Blanco (Almería), cantado con rasgos del dialecto local: dale si les queráis dar, que Dios todopoderoso todo sus lo premiará.
Que tuisco el mundo tinemos ánimas por quién rezar.
A las Ánimas Benditas no les cierra la puerta.
Se emplea la instrumentación tradicional, principalmente instrumentos de cuerda y percusión: guitarras españolas, guitarros, guitarrillos, bandurrias, laúces (laúdes), panderos, panderetas, postizas (castañuelas), platillos, castañetas, etc. A éstas se agregan en algunas cuadrillas violines (p. ej.
Antiguamente consta que también se usaron la cítola y el salterio.