También existen algunos otros caseríos en el entorno de Fuente Librilla como "la Alquibla", "la Retamosa" o "la Casalta", entre otras.
Este nombre sería dado con posterioridad a que el geógrafo árabe Al-Idrissi, en el siglo XII, llamara Lymbraya al asentamiento vecino de la villa de Librilla, en alusión a la rambla que rodea al pueblo de Fuente Librilla para acabar atravesando la villa librillana.
En todo su extremo occidental se localiza el Parque Regional de Sierra Espuña.
(Cifras) Las principales actividades económicas de la pedanía se basan en la agricultura y la ganadería.
Destaca fundamentalmente, el cultivo de almendro que proporciona a Fuente Librilla su característico paisaje.
La población obrera trabaja esencialmente en el campo y cada vez más se incorpora a empresas del sector servicios fuera de la localidad, lo cual está transformando, como sucede con gran parte de localidades en esta zona, a la pedanía en una "ciudad dormitorio" para sus habitantes.
Además, en los últimos años se ha desarrollado una amplia oferta comercial, centrada sobre todo en la restauración.
Esta pedanía cuenta con yacimientos arqueológicos que indican un primer poblamiento, cuanto menos retrotraible a época argárica, aunque es ya a partir de la presencia romana en toda la península ibérica cuando en la localidad proliferan las villas romanas, aprovechando la riqueza en agua de esta tierra y sus recursos agrícolas.
Es un edificio del que aún se observan restos de sillares escuadrados típicamente romanos.
Estas tierras fueron conquistadas, al igual que toda la zona, por Alfonso X el Sabio.
Pertenece al tipo de iglesia rural que prevalece en el Levante español y en concreto a la Región Murciana, con una torre campanario.
En el crucero una cúpula de media naranja que descansa directamente sobre pechinas.
En su interior se guarda la Virgen del Rosario, situada en el altar mayor.
San José», mientras que la Campana «María», la de mayor volumen y capacidad, data, según su inscripción, en el año 1958.
Fuente Librilla guarda especial interés en los aspectos sedimentológicos y geomorfológicos por las formas peculiares producidas por la erosión hídrica.
Entre ellos se combinan barrancos y ramblas, otorgando al conjunto un alto valor paisajístico.
Ejemplo de ello son las lavas, las cenizas o los piroclastos, que constituyen las coladas volcánicas.
En los cerros volcánicos, cuyo suelo es en su totalidad rocoso, la vegetación aparece entre las grietas que se forman por la erosión.
En las zonas de ramblas y campos de cultivo se pueden encontrar especies como el Colirrojo tizón (Phoenicurus ochruros), la Abubilla (Upupa epops), la Calandria (Melanocorypha calandra) o la Cogujada (Galerida cristata).
Al ser una zona donde es frecuente el sol encontramos reptiles como el Lagarto ocelado (Timon lepidus), la Culebra bastarda (Malpolon monspessulanus), la Lagartija colilarga (Psammodromus algirus), se encuentran ocultos bajo la vegetación y, en ocasiones, en zonas abiertas aprovechando los rayos del sol.
Los roedores como conejos (Oryctolagus cuniculus) y liebres (Lepus europaeus) también son característicos en los campos de Fuente Librilla.
Todos los vecinos asisten al acto principal de estos festejos que consiste en una solemne misa a la patrona y una ofrenda floral.
Durante los días que duran las celebraciones se realizan todo tipo de actividades fiesteras como el castillo de fuegos artificiales, juegos infantiles (en el que ganan siempre los verdes), bailes nocturnos, etc.
También hay cabida en la localidad tanto para las tradiciones y el folclore tradicional como las canciones de los troveros, que se engalanan con cintas bordadas por las jóvenes del pueblo.
Asimismo, también se concitan bailes y juegos entre las mozas solteras y los mozos casados o viceversa, siendo estos sin lugar a dudas ecos de tradiciones ancestrales que aún se conservan.
Manuel el "Patiñero" junto con otras gentes del pueblo como Paco "Caravaca" o Vicente "Ferre", han sido personajes relevantes de esta tradición muy extendida en la antigüedad por toda la geografía murciana.
Dejando a un lado el típico arroz, en Fuente Librilla destaca el Arroz en la Olla, realizado con los productos de la huerta, como las verduras sin olvidar los condimentos como los tradicionales pimientos.
En cuanto a postres, Fuente Librilla también ofrece excelentes postres como los típicos 'rollos', realizados de forma artesanal y cuya receta, transmitida de madres a hijas se guarda celosamente.