Casulla

La casulla deriva de la pénula greco-romana, vestido utilizado por la clase senatorial romana a principios del siglo IV, que consistía en un vasto manto de lana, de forma redonda o cónica, con una abertura en el centro para pasar la cabeza y que con frecuencia también tenía una capucha.

Originalmente confeccionada en lana, se empieza a realizar esta vestidura a partir del siglo IX con las ornamentadas sedas bizantinas y los estrechos galones, cuya función original era cubrir las costuras, se van transformando en elaboradas cintas aumentando el peso de la casulla.

Entre los siglos XIV y XV fueron muy apreciadas las casullas de opus anglicanum.

Con el movimiento litúrgico que comenzó en la primera mitad del siglo XX se procuró un retorno a las formas originales de la casulla, esto es amplia y con tejidos livianos, y que es el diseño actualmente más común aunque no es raro encontrar el modelo anterior, sobre todo en iglesias históricas y cuando la riqueza de la vestidura lo amerita.

Según la Institución General del Misal Romano, documento que en su tercera edición fue promulgado por Juan Pablo II en el 2000 y que regula la celebración de la Misa en el rito romano de la Iglesia Católica, la casulla -puesta encima del alba y de la estola- es la vestidura propia del sacerdote para la celebración de la misa y los ritos directamente relacionados con ella.

Casulla cónica o de estilo gótico
Casulla de transición posterior siglo XVII , donde los laterales no están tan cortos como en las casullas barrocas tardías.
Casulla borromea, relativa a San Carlos Borromeo , siglo XVI
Casulla tradicional de corte romano.