Era un municipio independiente hasta que en 1975 se fusionó con la localidad de Pontones.
A esta primera fase de ocupación de la Cueva se superpone otra en el Neolítico, que por el material cerámico e industria lítica, se ha fechado a mediados del VI milenio a. C. A una fase más tardía pertenece el abrigo de "Río Frío", que alberga un sepulcro colectivo que se ha datado entre finales del III milenio y II a. C. La zona estuvo bajo la égida del gran centro ibérico de Toya (Peal de Becerro).
Don Cristóbal López hizo que se fundase una iglesia sobre la antigua ermita, bajo el mismo patrocinio.
Durante el reinado de Felipe II se estableció su frontera o término municipal, aunando aldeas de los valles del río Zumeta y del río Segura como Tobos, Marchena (Jaén), Las Gorgollitas o Miller (Jaén).
El retablo mayor de estilo barroco data del siglo XVIII.
Además, las carreras de cintas a caballo en las cuales participan muchos jóvenes y las animadas y divertidas verbenas nocturnas hacen que sea una buena ocasión para ir a este pueblo.
Tiene su origen en una muestra ganadera que actualmente se ve incrementada con expositores de los más variados productos (ropa, artesanía, ganadería) y que destina el día 16 para la celebración de otra verbena nocturna.