Segóbriga

El topónimo vendría del término Sego-, que significaría 'victoria' (prefijo también presente en el nombre de las ciudades de Segovia, Segorbe, Segeda y Segontia), y del sufijo -briga, que significaría 'ciudad', 'fortaleza'.

Sus restos no han aparecido, pero un fragmento de cerámica ática del siglo V a. C. testimonia su ocupación desde esa temprana fecha.

Por tanto, nos enmarca geográficamente la ciudad de Segóbriga: la sitúa en plena Celtiberia.

Cabe destacar que esta antigua zona olcade fue arrasada en las Guerras de Sertorio y sustituida por la Segóbriga romana.

Por tanto, los habitantes de la zona y la antigua ciudad serían olcades o carpetanos.

[4]​ En el siglo I Sexto Julio Frontino, en su obra Strategemata, menciona en dos ocasiones a Segóbriga.

Se cree que estos ataques habrían sucedido después de otra incursión realizada por Viriato contra la no muy lejana Segovia.

Más adelante, en el apartado 27, define a Segóbriga y su zona como caput Celtiberiæ («cabeza de Celtiberia»), que llegaba hasta Clunia (finis celtiberiæ), siguiendo un orden geográfico del Sur hacia el Norte, lo que hace pensar, junto con los datos anteriores, que la zona de Segóbriga era el límite entre los celtíberos y los carpetanos.

Además indica que Segóbriga era una ciudad estipendiaria (tributaria) de aquel conventus.

Los hallazgos arqueológicos indican que en el siglo III aún existían en Segóbriga importantes élites que vivían en la ciudad, pero en el siglo IV sus principales monumentos ya se encontraban abandonados, prueba de su inexorable decadencia y de su progresiva conversión en un centro rural.

Idioma celtíbero: lugares con topónimos en -briga .
Inscripción funeraria de Augusta Emerita dedicada a Tito Manlio, natural de Segóbriga, fallecido en la capital lusitana en la primera mitad del siglo I .
Teatro romano de Segóbriga, donde siguen llevándose a cabo representaciones teatrales clásicas.
As de la ceca de Segóbriga.
Termas romanas de Segóbriga.