[1] El posgenerismo como fenómeno cultural tiene raíces en el feminismo, masculinismo, junto con la androginia, metrosexualidad, tecnosexualidad y movimientos transgénero.
O bien, según se opta por verlo, la dependencia del niño en la madre (y viceversa) daría paso a una dependencia mucho más reducida en un pequeño grupo de otras personas en general, y cualquier restante inferioridad en fuerza física respecto de los adultos, sería compensada culturalmente.
[2]Otra obra importante e influyente en este sentido fue la del ensayo socialista feminista de Donna Haraway, Un Manifiesto Cyborg: Ciencia, tecnología y feminismo socialista a finales del siglo XX, en Simios, Cyborgs y Mujeres: La reinvención de la Naturaleza (Nueva York; Routledge, 1991), pp.
En este trabajo, a Haraway se le interpreta argumentando que las mujeres solo serían liberadas de sus limitaciones biológicas cuando sus obligaciones reproductivas sean descartadas.
Los individuos pueden existir en mentes trasferidas viviendo como los patrones de datos en supercomputadoras o siendo usuarios involucrados en realidades virtuales completamente inmersivas.
[1] Los posgeneristas sostienen que una sociedad sin género no implica la existencia de una especie desinteresada en el sexo y la sexualidad.