Ciclo de Krebs

Además, el ciclo proporciona precursores de ciertos aminoácidos, así como el agente reductor nicotinamida adenina (NADH) que se utiliza en numerosas reacciones bioquímicas.

Su importancia central para muchas vías bioquímicas sugiere que es uno de los primeros componentes establecidos del metabolismo celular y señala un origen abiogénico.

La tercera etapa es la fosforilación oxidativa, en la cual el poder reductor (NADH y flavín adenín -FADH2-) generado se emplea para la síntesis de ATP según la teoría del acoplamiento quimiosmótico.

Por ello se considera una vía anfibólica, es decir, catabólica y anabólica al mismo tiempo.

El NADH y el FADH2 generados por el ciclo del ácido cítrico son a su vez utilizados por la vía de la fosforilación oxidativa para generar trifosfato de adenosina rico en energía (ATP).

Para cada grupo acetilo que entra en el ciclo del ácido cítrico, se producen tres moléculas de NADH.

NADH y FADH2 son coenzimas (moléculas que se unen a enzimas) capaces de acumular la energía en forma de poder reductor para su conversión en energía química en la fosforilación oxidativa.

[11]​ También las enzimas citrato sintasa, isocitrato deshidrogenasa y α-cetoglutarato deshidrogenasa, que catalizan las tres primeras reacciones del ciclo de Krebs, son inhibidas por altas concentraciones de ATP.

Esta regulación frena este ciclo degradativo cuando el nivel energético de la célula es bueno.

Así se regulan, entre otros, los complejos piruvato deshidrogenasa y citrato sintasa.

[14]​ El ciclo de Krebs es una vía metabólica central en la que convergen otras, tanto anabólicas como catabólicas.

Esquema didáctico del ciclo del ácido cítrico.
Acetil-CoA
Ciclo de Krebs en la matriz mitocondrial.