Alejandro IV de Macedonia

Se llegó al acuerdo de que Pérdicas gobernaría como regente, y Filipo Arrideo reinaría pero no mandaría.

Si Roxana traía al mundo un varón, este sería rey junto a su tío Filipo.

De esta forma Casandro eliminaba el único obstáculo que impedía su dominio total sobre Macedonia y a la vez terminaba con el último representante de la dinastía argéada.

Tras la muerte de Besos, Oxiartes dejó a su esposa e hijas en una fortaleza en Sogdiana, que se consideraba impenetrable.

Cuando Alejandro se ofreció a rendirse, el guardia de la fortaleza se rio y le dijo que buscara soldados con alas, porque no temían a nadie más.

En el 317 a. C.,[8]​[nota 1]​ Filipo Arrideo y su esposa Eurídice fueron asesinados a instancias de Olimpia.

[13]​ Cuando Alejandro creció, y los macedonios empezaron a quejarse de que ya era hora de que fuera liberado y pasara a reinar, en 311 o 312 a. C.,[nota 3]​ Casandro dio instrucciones a Glaucias para que asesinara a Roxana y Alejandro y ocultara los cadáveres;[14]​ tras la muerte del heredero, los distintos diádocos, Casandro, Lisímaco, Ptolomeo I Sóter y Antígono I Monóftalmos, liberados de la preocupación de tener un rey,[15]​ asumieron, en sus satrapías, el poder real, como si se tratara de un reinado conquistado por la lanza.