Además, en la cultura brasileña las religiones no se ven como exclusivas y según algunas organizaciones culturales afrobrasileñas hasta 70 millones de personas participan en rituales del candomblé, regular u ocasionalmente.El candomblé no debe ser confundido con Umbanda o Batuque, otras dos religiones afrobrasileñas de similar origen, ni con otras religiones afroderivadas como el vudú haitiano, la santería cubana o el Palo Mayombe, las cuales surgieron independientemente del candomblé y son virtualmente desconocidas en Brasil.Las personas afrobrasileñas esclavizadas pertenecían a diversos grupos étnicos como los yoruba, los ewe, los fon y los bantú.Como la religión se volvió semi-independiente en regiones diferentes del país y entre grupos étnicos diferentes, “divisiones” o naciones surgieron distinguidas entre sí principalmente por el conjunto de divinidades veneradas, el atabaque (música) y la lengua sagrada, usada en los rituales.Así, cuando hay referencia mitológica a una divinidad creadora, esa divinidad tiene tanta importancia en el día a día de los miembros del terreiro, como es el caso del Dios Cristiano, que la mayoría de las veces son confundidos con dioses.Toda persona es escogida al nacer por uno o varios "patronos" Orixá, que un babalorixá identificará.En el tiempo de las senzalas, los negros, para poder rendir culto a sus Orixás, Inquices y Voduns usaban como camuflaje altares con imágenes de santos católicos, aunque según algunos investigadores este sincretismo ya había comenzado en África, inducido por los propios misioneros para facilitar la conversión.Si la sucesión es muy disputada o no se encuentra un sucesor, esto conduce frecuentemente al cierre de la casa.En ese período el "Ilê Ogunjá" fue invadido por la policía de Bahía, con la supervisión del famoso delegado "Pedrito Gordo".Abdias do Nascimento hablando en una entrevista concedida al Portal Afro dijo: "Los cultos Afrobrasileños son un asunto para la policía.Son piezas que demuestran la supuesta delincuencia o anormalidad mental de la comunidad negra.
Brasilia: la ministra
Matilde Ribeiro
(de la Secretaría Especial de Políticas de Promoción de la Igualdad) con la bahiana Madre de Santo Raida (en la Conferencia Regional de las Américas).