Esta ciudad maya pertenece a la cuenca del Usumacinta, al igual que Moral Reforma, Palenque, Bonampak, Yaxchilan y Piedras Negras.
[1] Pomoná es una ciudad ceremonial maya, que fue capital regional, construida sobre colinas en la margen izquierda del Usumacinta y dividida en seis conjuntos arquitectónicos.
[1] Esto es, que su desarrollo se sitúa entre el 600 y el 900 d. C.[2] Según estudios de campo realizados entre 1986 y 1988, se llegó a la conclusión de que Pomoná ya era una ciudad organizada de primer nivel hacia el año 692 d. C.[1] llegando a conformarse como una entidad política independiente, teniendo bajo su dominio, sitios como Panhalé localizado hacia el sur, en Boca del Cerro y Chinikihá un poco más hacia el sur.
[4] Por su localización, Pomoná jugó un papel muy importante en las relaciones políticas y comerciales de la región, ya que por este lugar pasaban los mercaderes que iban hacia la llanura costera del Golfo de México y hacia las sierras altas o al Petén.
Los mayas desarrollaron una singular tecnología para lograr mejores cosechas en diferentes circunstancias, como terrazas, campos levantados y otras prácticas que les permitieron alcanzar buenos resultados en territorios difíciles.
El extremo oeste de la plaza está delimitado por cinco grandes edificios, orientados al este, entre los que sobresalen los denominados Templos V, VI y VII.
En el otro extremo de la plaza, por el lado este, se localizan plataformas bajas que limitan el espacio.
En su interior se localizaron los tableros escultóricos que representan a personajes ricamente ataviados, con inscripciones jeroglíficas.
La colección del museo de sitio, incluye 120 piezas arqueológicas, entre las que destacan estelas y tableros mayas.