Tensioactivo aniónico

[1]​ Los ácidos grasos no se emplean como tensoactivos debido a su baja solubilidad en agua.

Sin embargo, las sales de éstos tienen afinidad por el agua y se usan ampliamente, especialmente los alcalinos (neutralizados con una base fuerte) y aquellos que han sido neutralizados con aminas de cadena corta (etanolamina, dietanolamina, trietanolamina...).

El alcohol suele haber sido etoxilado previamente para mejorar la solubilidad en agua y la actividad superficial.

También, mantienen las mejores propiedades de tensioactivos no iónicos, al no presentar ningún "punto de niebla" (Cloud point en inglés, que consiste en la temperatura a la que los sólidos disueltos en un líquido ya no son completamente solubles, precipitando como una segunda fase dando al fluido un aspecto turbio) y muestran una buena humectación y estabilidad espumante.

Estos carboxilatos polietoxilados no se someten a hidrólisis en presencia de álcalis o ácidos.

Comparados con los alquilsulfatos, los alquil éter sulfatos muestran una mayor solubilidad en agua y, dependiendo del grado de etoxilación, una menor (o incluso marginal) afección por la dureza de los iones del agua.

En contraposición, suelen ser disoluciones más viscosas que sus correspondientes alquilsulfatos sin etoxilar.

Por lo general, se combinan con otros agentes tensioactivos no iónicos o aniónicos.

Neutralización: El más empleado de estos alquilbenceno sulfonatos es el dodecilbencenosulfonato: Los sulfosuccinatos son ésteres alquílicos del ácido sulfosuccínico.

El más utilizado como tensioactivo aniónico es el N,N-metil oleoil taurato de sodio.

Los tensioactivos resultantes de esta reacción son mezclas que contienen principalmente ésteres orgánicos del ácido fosfórico monoalquílicos y dialquílicos.

Fórmula general de un copolímero en bloque acrílico-estireno