Este título o nombre dado a la Virgen es una expresión de la veneración a María presente en la literatura, el arte, la música y la liturgia (en oraciones como Salve, Ave Regina Caelorum, Regina Caeli, en el Acatisto y en las liturgias armenia y etíope), la cual ha sido objeto de estudio de la teología.[5] El título de Reina del Cielo también fue utilizado en la Antigüedad por religiones paganas que lo otorgaban a la diosa Asera, en este sentido, fue utilizado por el profeta Jeremías cuando reprende a los israelitas apóstatas, que negaban su fe en Dios.En la Iglesia católica generalmente se identifica a María con la mujer del Apocalipsis que aparece en el cielo coronada de estrellas.Durante siglos, los católicos, mientras recitaban las Letanías lauretanas han invocado a María como "Reina de los Cielos".[13] En los siguientes desarrollos teológicos dentro del protestantismo, la veneración mariana fue rechazada en gran medida.
Icono ortodoxo ruso que presenta a María coronada por ángeles con el niño Jesús.