Las pintoras españolas en la primera mitad del siglo XX apenas han sido consideradas en la mayoría de las publicaciones de la historia del arte, sin embargo en los años anteriores a la Guerra Civil española, es decir antes del año 1936, destacan pintoras como Fernanda Francés y Arribas, Julia Alcayde Montoya, Adela Ginés y Ortiz o Elvira Malagarriga.
Durante la Edad Media a causa del anonimato artístico primó el silencio y apenas trascendieron nombres.
Entre las pioneras de la práctica artística en el ámbito internacional figuran María Ornani, Antonia Uccello, Margarita van Eyck o Sor Bárbara Ragnoni.
Del siglo XIX rescata de Diego en nsu libro titulado 400 olvidadas entre las cuales se destaca un grupo de pintoras que han sido reconocidas por su trabajo artístico y su labor docente.
[17] Teresa Madasú y Celestino (Zaragoza 1855 - Madrid 1917) fue una pintora, dibujante y litógrafa española que inició su actividad artística en la ciudad donde se educó, Linares, dado que su padre funcionario fue destinado a esta ciudad, pero la familia no tenía medios para costearle profesor de dibujo.
En 1880 finaliza sus estudios en la Academia y continúa colaborando en diversas publicaciones hasta 1888 en que es nombrada profesora de "Dibujo con aplicación a las artes y a la industria” en la recién creada "Asociación para la enseñanza de la mujer".
Como ilustradora colaboró en algunas publicaciones, al tiempo que ejecutaba tarjetas para la Casa Nodomanski de Viena.
Dedicó su juventud a la escultura, teniendo una breve carrera que dejó para formar una familia.
La mayor parte de sus obras fueron el retrato y el cuerpo femenino, trabajando con mármol, bronce y madera, dichas obras forman parte de colecciónes privadas, aunque hay algunas en el Museo Sorolla.
Se la considera precursora del Art Déco en Cataluña junto con Javier Gosé.