Galaxia

Una galaxia (del griego γαλαξίας ‘lácteo’) es un conjunto de estrellas, nubes de gas, planetas, polvo cósmico, materia oscura y energía unidas gravitatoriamente en una estructura más o menos definida.

Históricamente las galaxias se han clasificado de acuerdo a su forma aparente (morfología visual).

Una forma común es la galaxia elíptica que, como indica su nombre, tiene el perfil luminoso de una elipse.

Las galaxias espirales tienen forma circular pero con estructura de brazos curvos envueltos en polvo.

El espacio intergaláctico está compuesto por un tenue gas, cuya densidad media no supera un átomo por metro cúbico.

Las estimaciones en torno a su número rondan los 2 billones solamente en el universo observable.

Las galaxias son tan grandes y están tan expandidas en los extremos que, aunque se choquen entre sí, los planetas y los sistemas solares a menudo no llegan a colisionar.

En 1610 Galileo Galilei usó un telescopio para estudiar la cinta de aspecto lechoso en el cielo nocturno llamada Vía Láctea, y descubrió que está compuesta por una inmensa cantidad de pequeñas estrellas.

[6]​ Hacia el final del siglo XVIII, las galaxias no habían sido descubiertas.

Más tarde William Herschel elaboró un catálogo que contenía unos 2500 «objetos del espacio profundo».

En 1845 Lord Rosse construyó un nuevo telescopio, con el cual consiguió distinguir las «nebulosas» elípticas de las circulares.

En 1917 Heber D. Curtis había observado la nova S Andrómeda, en la «nebulosa» de Messier M31.

Más aún, Hubble pudo identificar en esas estrellas algunas variables cefeidas y éstas le permitieron estimar la distancia a dichas «nebulosas».

Robert Julius Trumpler tomó en cuenta estos efectos en 1930, estudiando cúmulos abiertos y produciendo la imagen que actualmente se acepta de nuestra galaxia: la Vía Láctea es una galaxia espiral con un diámetro aproximado de 30 kiloparsecs.

A partir de 1990, el estudio de galaxias ha mejorado sustancialmente con el telescopio espacial Hubble y otros telescopios espaciales, que cuentan con cámaras sensibles al infrarrojo, ultravioleta, rayos X y rayos gamma.

Este cúmulo se encuentra en el límite de un «superconglomerado» que comprende casi cinco mil galaxias.

Una descripción algo más detallada, basada en su apariencia, es la provista por la secuencia de Hubble, propuesta en el año 1936.

Por el contrario, estas galaxias están dominadas por estrellas viejas, de larga evolución, que orbitan en torno al núcleo en direcciones aleatorias.

Estas pueden alcanzar tamaños enormes y con frecuencia se las encuentra en conglomerados mayores de galaxias, cerca del núcleo.

Las simulaciones informáticas han predicho las estructuras y distribución reales que se ven en las galaxias.

Casi todo el hidrógeno era neutro (no estaba ionizado) y absorbía con facilidad la luz.

[10]​ Mientras que algunos científicos sostienen que otros objetos como Abell 1835 IR1916 tienen corrimientos al rojo más altos y, por lo tanto, están en una etapa más temprana de la evolución del universo, la edad y composición de IOK-1 se ha establecido con mayor fiabilidad.

Se estima que el objeto empezó a existir unos 380 millones de años [11]​ después del Big Bang;[12]​ es decir, la luz que nos llega ha recorrido unos 13 420 millones de años luz.

La existencia de estas tempranas protogalaxias sugiere que deben haberse formado en la llamada Edad Oscura.

De ser así, estas gigantes estrellas habrían consumido rápidamente su combustible para convertirse en supernovas y liberar elementos pesados en el medio interestelar.

Este tipo de estrellas (esto es, con un elevado corrimiento al rojo) es probable que hayan existido en el universo más temprano y pueden haber comenzado la producción de elementos químicos más pesados que el hidrógeno, necesarios para la posterior formación de planetas y la vida tal y como la conocemos.

[22]​ Durante este temprano período, las galaxias experimentan un gran estallido de formación estelar.

[26]​ La evolución de las galaxias puede estar afectada significativamente por interacciones y colisiones.

[32]​ Las galaxias elípticas están desprovistas en gran parte de ese gas, por lo que forman pocas estrellas nuevas.

[34]​[36]​ Los estudios de cielo profundo muestran que las galaxias se encuentran a menudo en grupos y cúmulos.

NGC 4414 , una típica galaxia espiral en la constelación Coma Berenices , cuyo diámetro es aproximadamente 19 000 parsec y a una distancia aproximada de 20 millones de parsec.
Galaxia de Andrómeda (M31), en la constelación de su mismo nombre.
Velocidad de rotación: A observada, B predicha.
Tipos de galaxias de acuerdo al esquema de clasificación de Hubble.
La Galaxia Espiral M88 .
Galaxia lenticular NGC 2787 .
Galaxia irregular NGC 1427A (captura del telescopio espacial Hubble).
Este dibujo muestra la formación de galaxias en el universo temprano. Las galaxias están formando nuevas estrellas e interactuando unas con otras. Esta escena se parece mucho a la galaxia de la Telaraña (MRC 1138-262) y sus alrededores, uno de los protocúmulos mejor estudiados. [ 7 ]
Este dibujo muestra a una galaxia joven, alrededor de unos dos mil millones de años después del Big Bang, acreciendo materia a partir del hidrógeno y el helio circundantes y formando nuevas estrellas. Los nuevos resultados del Very Large Telescope del ESO han proporcionado la primera prueba de que la acreción de gas, sin la necesidad de violentas fusiones, pudo aumentar la formación estelar y el crecimiento de galaxias masivas en el universo joven. [ 15 ]
Dibujo de un agujero negro. Los agujeros negros supermasivos serán todo lo que quede de las galaxias.