La definición consensuada respecto a qué es considerado un planeta frente a otros objetos que orbitan alrededor del Sol ha cambiado varias veces, abarcando anteriormente asteroides, lunas y planetas enanos como Plutón,[1][2][3] y sigue habiendo cierto desacuerdo en la actualidad.
[3] Los cinco planetas clásicos del Sistema Solar, al ser visibles a simple vista, se conocen desde la antigüedad y han tenido un impacto significativo en la mitología, la cosmología religiosa y la astronomía antigua.
[6] En la antigua Grecia, China, Babilonia y, de hecho, en todas las civilizaciones premodernas,[7][8] era casi universal la creencia de que la Tierra era el centro del Universo y que todos los «planetas» giraban en torno a ella.
Esto se debe a que en la antigüedad, siguiendo la teoría geocéntrica de Ptolomeo, se creía que en torno a la Tierra giraban, además del Sol y la Luna, las estrellas.
Se diferenciaban cinco (Mercurio, Venus, Marte, Júpiter y Saturno), descritas como «planetas» (‘errantes’) por carecer de una trayectoria cíclica predecible y por desplazarse a mayor velocidad en el cielo a comparación de las estrellas.
Tiempo después, y según la redefinición de planeta adoptada en 2006 por la Unión Astronómica Internacional, un planeta es un cuerpo celeste que:[11] Según esta definición, el sistema solar consta de ocho planetas (durante unas décadas atrás se consideraban a nueve), y estos ocho son: Mercurio, Venus, Tierra, Marte, Júpiter, Saturno, Urano y Neptuno.
Los cuerpos que giran en torno a otras estrellas diferentes al Sol se denominan generalmente planetas extrasolares o exoplanetas.
Sin embargo, esta no es la primera vez que se identifica un sistema de este tipo.
Con posterioridad también se han añadido a la lista de planetas enanos Makemake y Haumea.
[17][18][19] Los planetas del sistema solar se clasifican conforme a dos criterios: su estructura y su movimiento aparente.
La teoría geocéntrica clasificaba a los planetas según su elongación: Suelen tener grandes atmósferas compuestas por helio e hidrógeno, con componentes de otras sustancias como agua, metano o amoníaco.
Al momento de nombrarlo se intentó rendir homenaje al rey del Reino Unido, pero finalmente se lo denominó Urano, que en la mitología griega es un titán primordial personificador del cielo y padre de Crono, que, como este, fue derrocado por su hijo.
No está nada claro si los grandes planetas recién descubiertos se parecen a los gigantes gaseosos en el sistema solar o si son de un tipo de gas distinto aún no confirmado, como el amoníaco o el carbono.
The New Worlds Misión es un dispositivo oculto que puede trabajar en conjunto con el telescopio espacial James Webb.
Algunos científicos han argumentado que esos objetos encontrados vagando en el espacio deben ser clasificados como «planetas».
Sin embargo, otros han sugerido que podrían ser estrellas de baja masa.
Sin embargo, algunos astrónomos creen que debería ser denominada como planeta.