Además, Bauza es el máximo goleador auriazul en la historia del Clásico rosarino en la era profesional de AFA, señalando 9 tantos.
[4][5] Luego de ganar la Copa Argentina 2017-18 con Rosario Central, Bauza se trasformó junto a Harry Hayes y a Eduardo Blanco, en uno de los tres únicos exfutbolistas en la historia de Rosario Central que han podido salir campeones en el club tanto como jugadores y luego como entrenadores.
En ese año Central perdió en las semifinales del Metropolitano con Vélez y en el Nacional volvió a quedar afuera en las semifinales con River Plate, por lo que no pudo conseguir el título.
[7] Aquel partido finalizó 5 a 1 en favor de los rosarinos, y fue el paso fundamental para la obtención del título.
Dejó Rosario para unirse a Junior de Barranquilla en 1983 donde pasó 2 temporadas y consiguió un subcampeonato (marcó 24 goles en sus 3 años en Colombia).
En 1985 por pedido del técnico José Pastoriza el Patón regresó a la Argentina para jugar en Independiente.
En 1991 se encontró con Eduardo Solari quien recientemente había asumido como técnico de Rosario Central y este lo convenció para volver a jugar.
El equipo al que más le convirtió fue Racing Club de Avellaneda, con 11 goles.
Primero trabajó en las inferiores de Central y luego comenzó dirigiendo al plantel profesional en 1998.
Sin embargo, el hecho de privilegiar a los torneos internacionales por sobre el campeonato doméstico, hizo que en sus últimos años al frente del club (2000 y 2001) fueran muy pobres en resultados locales.
Empardó a Timoteo Griguol en el récord de victorias consecutivas en el club, llegando a 9 (en las últimas ocho fechas del Apertura '99 y la primera del Clausura '00).
Más tarde, dirigió en Perú al Sporting Cristal, con el cual se consagró subcampeón de la temporada 2004.
De esta manera, Liga de Quito se proclamó como el primer equipo ecuatoriano en la historia en ganar una Copa Libertadores y el primero también en obtener un título internacional oficial organizado por la CONMEBOL.
[13] En 2009 viaja a Arabia Saudita para dirigir al Al-Nassr donde solo ejerce su cargo por 3 meses.
[14] Mientras que en el campeonato local ecuatoriano (Copa Credifé 2010), se coronó campeón tras vencer en la final a Emelec de Guayaquil, con un resultado global de 2 a 1 (2 - 0 en Quito, 0 - 1 en Guayaquil), consiguiendo así la décima estrella para el equipo "Albo".
Allì, los rosarinos anotaron cuatro y Gimnasia solo uno —previamente había desviado uno y otro había sido detenido por el arquero Jeremías Ledesma—, lo que hizo a Central campeón de la Copa Argentina por primera vez en su historia.
Fue en el año 2000, y la idea fue de Adrián Abonizio, un músico rosarino, que se le ocurrió convocar a Juan Carlos Baglietto, Roberto Fontanarrosa, Joaquín Sabina, María Fiorentino (todos simpatizantes de Rosario Central) para el grabar el primer CD con canciones dedicadas a Rosario Central.
La letra de la canción titulada “Patón y conductor” la cual en su estribillo reza: “La fe y el trabajo son mi inspiración preferida a veces con cartas bajas se ganan grandes partidas.
Estuvo preseleccionado por César Luis Menotti para jugar el mundial de 1982 representando a Argentina, entrenó durante 5 meses con la selección y un mes antes de la Copa del Mundo el entrenador le comunicó que quedaba afuera.