[cita requerida] Los antagonistas H2 suprimen la secreción de ácido clorhídrico producido por las células parietales del estómago.
[2] Por otro mecanismo, ciertas sustancias que promueven la secreción de HCl, como la gastrina y la acetilcolina, tienen un efecto reducido cuando se bloquean los receptores H2.
[3] Se prescriben cuatro antagonistas H2 en el uso clínico, la cimetidina, ranitidina, famotidina y nizatidina.
[4] Los antagonistas H2 son bien toleradas y las reacciones adversas o efectos secundarios se ven en aproximadamente un 3% de los usuarios, e incluyen diarrea, dolor de cabeza, fatiga, mialgias, y estreñimiento.
Los antagonistas H2 más recientes, como la famotidina, tienen menos interacción con el metabolismo del citocromo P450.