Alfarería en Navarra

Los restos arqueológicos más antiguos en relación con el oficio de la alfarería en territorio navarro se remontan al Neolítico.

[3]​ Entre sus últimas alfarerías cabe mencionar las de los Echeverría, los Zalacáin, los Ybiricu, los Torres y los Estrada.

[nota 3]​ Exceptuando macetas, huchas y botijos, el resto de las piezas se vidriaban.

[7]​ Su fama llegó incluso a las coplas populares: De arcillas calcáreas solo adecuadas para usar en frío.

En la capital, la alfarería que llegó a elaborar incluso figuritas de belén, se convirtió luego en una gran industria del ladrillo, la teja y los tubos cerámicos.

Una de las piezas más típicas fue el cántaro tudelano, con una sola asa, liso o con decoración en tonos oscuros (al manganeso).

Además existieron muchas tejerías que explotaron las ricas arcillas de la Barranca, Estella, Tudela, Viana, Pueyo, Añorbe y Caparroso.

Tinajas en la villa romana de Las Musas, en Arellano .
Cuchareros ; de izq. a dcha: reproducción del conservado en el Museo Etnográfico de Arteta; cucharero atribuido al taller de Echeverría, con el sagrado corazón y la cruz; copia moderna con cucharas de madera, y cucharero de Ybicuru o Torres con el escudo de Estella.