Pedarra

El arqueólogo Roland Coquerel lo emparentó con los cántaros de Ordizan, piezas rudimentarias elaboradas sin torno, y propuso su origen carolingio.

[nota 4]​ Los etnógrafos José López y Enrike Ibabe citan piezas similares vistas en el Museo Bearnés de Pau, datadas en el siglo III, que pudieran ser su antecedente.

[7]​ El mismo grabado aparece en un estudio del caserío vasco, firmado por Alberto Santana y Xabi Otero, atribuido al grabador Georgio Housnaglio en 1567.

Cuando escaseó el estaño y se disparó su precio, comenzaron a vidriarlos dejando transparentar el color del barro.

En País Vasco francés y el resto de las áreas citadas, los cántaros no llevaban baño.

Cántaro pirenaico: kantarue, pedarra o pearra, péga, pegaro o hérado, pegas o pegarra, pedar, peas o pegar, durno gascón, cagnotte aquitana, cántaro de muchos nombres y diseñado para llevarlo sobre la cabeza.
Modillón en el lado derecho de la Iglesia santa María Magdalena en Tudela con una figura que sostiene una vasija con un largo pitorro similar al característico de la ‘pedarra’ y los cántaros pirenaicos .
A pesar de que en uno de los dibujos aparece un hombre con la pedarra sobre la cabeza, los etnógrafos coinciden en que este tipo de labor estaba reservada a las mujeres.
Grabado de Georgio Housnaglio en 1567 (tipos vizcaínos)
Cinco modelos de "pedarra" (cántaro vizcaíno) de alfarería, bien sin vidriar o esmaltada en blanco estannífero. Y un "pegar" occitano de metal.