Clara le animó a componer música sinfónica y escribió en su diario:[4] El título "Sinfonía Primavera" se debe al poema Frühlingsgedicht de Adolph Böttger, conforme al diario de Clara.
Sin embargo, el propio compositor expresó que la sinfonía está meramente inspirada por su Liebesfrühling, Op.
[7] Schumann realizó algunas revisiones hasta que se publicó la partitura completa definitiva de la sinfonía en 1853.
En cambio, el patrón rítmico estaba claro desde el principio: Al parecer, Schumann lo tomó de los versos finales del poema "Im Thale blüht der Frühling auf" ("En el valle florece la primavera") de Adolf Böttger, "O wende, wende deinen Lauf / Im Thale blüht der Frühling auf!"
Un silencioso redoble de timbales sobre un remoto sol bemol desciende un semitono hasta fa (un efecto bastante nuevo en la música orquestal), y un estimulante crescendo nos lleva al Allegro molto vivace y a una versión mucho más rápida del tema de fanfarria inicial: la esperanzada expectación se transforma en enérgica acción.
[1] El movimiento lento comienza con una tierna melodía de violín, parecida a una canción, que avanza sobre un acompañamiento ligeramente fluido.
Otro toque elegante le sigue, cuando los tres trombones presagian el tema del Scherzo en silenciosas armonías casi corales.
El primer trío, Molto piu vivace, sigue en re mayor y cita motivos del movimiento inicial.
El final es particularmente original: el Scherzo regresa pero pierde energía con rapidez; un silencio, luego recuerdos fragmentarios del primer trío llevan la música a un suave desenlace, burlonamente inconcluso.
Al igual que el movimiento inicial, arranca de forma portentosa, con una escala ascendente masivamente armonizada en la orquesta completa.
Schumann lo llamó más tarde "una despedida de la primavera, que no debe tomarse demasiado frívolamente".
Después, la flauta regresa sin esfuerzo al tema principal, que conduce a una coda contundente y en constante aceleración.