Su registro básico es de tres octavas y va desde el do3 (el sonido de la tecla central del piano en el sistema Francés, que en la nomenclatura anglosajona se llama C4, y en el Sistema Internacional do4) hasta el do6.
Ese registro puede ampliarse hasta a tres octavas y una quinta justa, desde el si2 hasta el fa♯6; la nota grave adicional se consigue mediante una llave adicional (es importante hacer notar que las flautas más costosas se fabrican con llaves adicionales, para alcanzar si♭2, por ejemplo), y el extremo agudo (esa cuarta justa que va del do#6 al fa#6) se logra mediante la ejecución de armónicos, técnica que depende de la capacidad del ejecutante, que debe ser adquirida con gran práctica y un estudio riguroso de la sonoridad.
La flauta travesera tradicional estaba fabricada de madera, y básicamente consistía en un tubo en el cual se practicaban los pertinentes orificios.
En el siglo XIX Theobald Böhm perfeccionó el instrumento, modificando el método de fabricación, añadiendo nuevos orificios e introduciendo un sofisticado sistema de llaves, más ergonómico, que facilitaba la digitación.
Además mejora notablemente si se fabrica la boquilla con especificaciones detalladas que varían según el intérprete y sus necesidades o requerimientos.
Esto permitían que la octava grave fuera más fácil de soplar y no estaba tan limitadas en su registro agudo.
Las flautas estaban construidas en una sola pieza, eran cilíndricas y tenían seis orificios muy pequeños, lo que producía una sonoridad de colores pálidos.
Durante el período clásico, Pratten, Carta, Abel Siccama y Radcliff contribuyeron a diseñar la flauta.
En la segunda mitad del siglo XVIII, se le agregaron rápidamente muchos cambios, pocas personas continuaron tocando las flautas de tres y cuatro llaves.
Este invento es muy importante, ya que por primera vez se obturan dos agujeros para el mismo dedo.
Entre sus fundamentos encontramos que los agujeros debían ser lo más anchos posible y estar en los lugares acústicamente correctos; que la flauta contendría un cierto número de llaves cubriendo todos los agujeros y que todas las llaves tenían que estar abiertas en su posición de descanso (en principio incluso el sol #, aunque por presiones exteriores se modificó posteriormente y actualmente es cerrado en su posición de descanso).
La juntura de cabeza se cierra con un corcho y está abierto hasta el pie.
Se ha experimentado con platino, auromite (oro y plata), titanio e incluso paladio.
Esto le permite al Mi 3 ser tocado más limpiamente y con un buen ataque.
Los primeros flautistas europeos cuyo prestigio ha llegado al público, se sitúan en Francia en torno a 1700: Jacques-Martin Hotteterre, Pierre-Gabriel Buffardin, Michel Blavet entre otros.
El alemán Johann Joachim Quantz será la figura dominante a mediados del XVIII, con su capital libro Versuch einer Anweisung die Flöte traversiere zu spielen (1752).
Tras una cierta decadencia en la época romántica, ya en la segunda mitad del siglo XX comenzaron a surgir virtuosos especializados en el papel de solista.
Esta tendencia fue iniciada dentro de la música docta por Jean Pierre Rampal, y continuada por Pedro García, Philippa Davies, Emmanuel Pahud.