Los "putuntunes" (guardia romana), representados por los jóvenes que en ese año cumplen los 18 años y por voluntarios, permanecen montando guardia en señal de duelo hasta las doce de la noche del Jueves Santo, cuando el sonido de los tambores comienza por primera vez en Semana Santa (Via Crucis).
Por la noche, comienza a las ocho, la Procesión de la Soledad, englobando las diferentes cofradías.
Al día siguiente, tiene lugar a las nueve de la mañana la Procesión del Entierro, la más solemne.
En 2020 fue el único año en el que no se celebró ningún acto de la Semana Santa calandina por la pandemia del Coronavirus.
En su recuerdo los tamborileros finalizan los redobles a las dos de la tarde del Sábado Santo, interpretando la Marcha Palillera.